Inicio > Estrategia: las contras de abusar del limp en las mesas

La estrategia del poker ha ido evolucionando bastante en las últimas décadas. El surgimiento de los softwares analíticos hizo que los análisis sean cada vez más minuciosos, llegando a descubrir nuevas estrategias que años antes eran impensadas. Sin embargo, hay una máxima que se sigue manteniendo a lo largo de los años: hacer limp no es bueno. El coach y profesional Jonathan Little Flag of Estados Unidos, recientemente realizó una publicación explicando las contras de abusar del limp en las mesas.

Qué es el limp

Primero lo primero: ¿Qué es hacer un limp? Se llama limp a la acción de pagar la ciega grande en la instancia preflop, en lugar de hacer un open raise. Este movimiento es comúnmente reconocido como débil, ya que no toma ningún tipo de iniciativa para ganar el pozo con el fold de los rivales, además de que permite ver un flop gratis para la ciega grande, y barato para el resto de los jugadores.

Por qué no es recomendable

El limp pocas veces forma parte de una estrategia ganadora. Si bien algunos jugadores alegan que les sirve para ver «flops baratos», este es un enfoque errado. Como dice Little, «El objetivo en el poker no es ver flops baratos, sino ganar dinero«. Si hacemos limp, quedamos en una situación de pasividad, dependiendo enteramente de conectar una buena mano para ganar. Contra oponentes agresivos, muchas veces nos terminaremos enfrentando a subidas más largas, que nos harán foldear o pagar fuera de posición y sin la iniciativa.

En cambio, hacer un open reaise nos permite tomar el control de la mano, representando fuerza y dejándonos como el agresor en las instancias siguientes. Además, subir siempre trae la posibilidad de ganar la mano al hacer foldear a los demás jugadores. Una subida inicial también nos permitirá recolectar información sobre el rango de nuestros rivales al ver cómo reaccionan.

El overlimp

Uno de los caos en los que hacer limp no es tan mal visto, es en el overlimp. Este concepto se usa cuando ya varios jugadores han hecho limp antes que tú, y decides sumarte al pozo pagando la ciega. Esto nos permite participar de un pozo potencialmente grande, arriesgando relativamente poco. De todos modos, es importante tener en cuenta algunos factores para hacerlo. Lo ideal es hacerlo en posición, ya que al no ser agresores preflop, al menos podremos obtener información al actuar después que nuestros rivales. También es aconsejable hacerlo con suited connectors bajos y medios, como 5 6, ya que nos permite ganar pozos grandes si llegamos a conectar contra jugadores que hacen limp con manos como par de ases.

Completar en la SB

Otro caso en el que el limp puede llegar a ser útil es cuando estamos en la ciega chica (SB). Al haber puesto ya la mitad de la ciega, matemáticamente el limp deja de ser tan desfavorable. Además, hacer un raise en esa posición a veces puede dejarnos expuestos contra una BB agresiva.


En conclusión, si bien el limp es una estrategia que suele ser mala y débil, hay situaciones en las que podemos llegar a sacarle ventaja. De todos modos, el open raise debería seguir siendo nuestra principal arma para tomar la iniciativa en cada mano. Debemos saber que son excepcionales los casos en los que el limp pueda ser una estrategia ganadora.

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