Apuestas: ¿foldear, pagar o cuánto aumentar? El arte de la guerra y las formas de llevar dinero al pozo. Tipos de errores, las situaciones y cómo leer a nuestros adversarios.

¿Cómo, cuándo y dónde atacar? ¿Cómo, cuándo y dónde defenderse? Esas son las preguntas principales de un tratado de estrategia bélica. Esas son las preguntas que se hace y responde Sun Tzu en El arte de la guerra. Esas son las preguntas que se debe hacer cualquier buen jugador de poker en cualquier mesa.

El poker es un juego que se mueve en base a las apuestas que los jugadores realizan siguiendo el orden que la mesa impone. No hay mano de poker sin apuestas: para eso están el big blind y el small blind (la luz grande y la chica, en español, también llamadas “las ciegas”), garantizando de modo rotativo que haya siempre una apuesta que empiece a construir el pozo. Sin apuestas no habría juego, y por eso son un elemento que demandará ser pensado con todas las herramientas que tengamos a nuestra disposición.

En principio, las apuestas hay que pensarlas de dos modos diferentes: las que hacemos nosotros y las que hacen nuestros rivales. Son siempre apuestas, pero nos enfrentan a distintos escenarios. Tendremos que pensar, entonces, de dos modos diferentes: si nos ataca un rival con una apuesta, o si somos nosotros quienes avanzamos sobre el pozo. Recordemos lo que escribía sobre la guerra Ho Yen Hsi: Es incomparable la situación del ejército que ataca con la de ejército que debe defenderse.

En el poker, apostar es una forma de comunicarse en la que cada jugador se ve obligado a actuar de algún modo, brindando información sobre su mano y sus modos de jugar. Un jugador puede estar en una mesa siempre impasible con su mejor cara de poker, sin brindar a sus rivales ningún tipo de información en toda la partida con sus gestos, sus palabras o sus tics. Sin embargo, una vez por ronda, cada jugador debe apostar o responder a una apuesta ajena, brindando a los rivales una información crucial. Pero, al revés de lo que uno espera de una comunicación sincera, en el poker no sabremos nunca si lo que nos está diciendo nuestro rival es verdad o si es mentira. Nos brinda información, sólo que no sabemos si ésta es verdad o mentira. Saber interpretar las apuestas contrarias y saber volver difíciles de interpretar nuestras apuestas será la base del buen juego.

En general, las apuestas son uno de los elementos centrales que encontramos en cualquier libro sobre poker. Y no es de extrañar: las apuestas son, efectivamente, el momento de tomar algunas de las decisiones más importantes del juego: ¿pagar, aumentar o foldear? En tomar bien esa decisión reside muchas veces la diferencia entre hacer crecer nuestro stack o despedirnos de una mesa. Un famoso artículo de David Sklansky enseñaba que en el poker puede parecer que hay muchas formas de equivocarse, pero sin embargo sólo hay ocho tipos de errores:

1. pasar cuando hay que apostar
2. apostar cuando hay que pasar
3. ver cuando hay que tirarlas
4. ver cuando hay que subir
5. tirarse cuando hay que ver
6. tirarse cuando hay que subir
7. subir cuando hay que ver
8. subir cuando hay que tirarse.

En su artículo, Sklansky piensa los errores para juegos con límite. En los juegos sin límite de apuestas como el no limit hold´em, habría que agregar dos nuevas opciones, tan importantes como las anteriores o incluso más importantes:

9. apostar menos cuando hay que apostar más
10. apostar más cuando hay que apostar menos

La cantidad de errores que un jugador comete es lo que diferencia a un mal jugador de uno bueno y son todas decisiones que se deben tomar a la hora de apostar o aceptar apuestas de nuestros contrincantes. No es extraño, entonces, que sean las apuestas uno de los elementos sobre los que más se insiste en libros o en sitios de internet que enseñan estrategias para mejorar nuestras estrategias.

Hay en estos libros y sitios algunas reglas que generalmente se enseñan para organizar los modos de apostar en una mesa y que será muy útil tener en cuenta, pero siempre recordando una de las enseñanzas principales de El arte de la guerra: debemos ser conscientes, siempre, de que todo depende de la situación concreta en la que nos encontremos y del fino análisis que consigamos hacer de esa situación. Lo Escribió Sun Tzu: El comandante competente es aquel que consigue la victoria a partir de la situación.

Así, toda apuesta ante la que nos encontremos deberá ser pensada teniendo en cuenta quién la realiza, qué estilo de juego está practicando ese jugador, cuál es la relación de su apuesta con el pozo, qué posición en la mesa ocupa el jugador, cuál es su stack, cuánto nos significa de nuestro stack aceptar esa apuesta, cuántos jugadores más quedan con opción de aceptarla o reaumentarla, etc, etc.

Conocer algunos tipos de apuestas habituales nos permitirá dos cosas fundamentales: por un lado, saber cuáles son las mejores formas de actuar cuando tengamos que apostar; y por otro lado, interpretar de modo más claro las apuestas de nuestros rivales para intentar dilucidar si llevan la mejor mano y lo que intentan es ganar más dinero con sus cartas ganadoras o si intentan amedrentar a sus rivales con un bluff.

No todas las apuestas son iguales, y no siempre hay que apostar de la misma forma. El objetivo en el poker es hacer que nuestros rivales cometan algunos de los errores que se han señalado (pagar cuando no corresponde, no pagar cuando sí, aumentarnos una apuesta cuando hubieran debido foldear, apostarnos menos de lo que hubieran debido, etc). Para esto deberemos conocer tanto el arte del ataque como el de la defensa y tanto uno como el otro podremos dominarlo tan sólo haciéndonos tres preguntas: ¿debemos abandonar nuestras cartas?, ¿debemos pagar la apuesta que la mesa nos propone?, ¿cuánto debemos apostar?.

Saber responder esas preguntas en cada situación nos abrirá el camino hacia el buen poker.

Durante sus años como General, Sun Tzu estudió y practicó diversas estrategias. En su Arte de la Guerra dejó escrito: Aquellos que dominan el arte de la defensa saben ocultarse debajo de los nueve repliegues de la tierra; aquellos que manejan el arte del ataque, avanzan con fuerza como si se lanzaran del noveno cielo. Así, los que practican el arte de la guerra son capaces tanto de volverse invencibles como de triunfar en el ataque.

Esas serán las preguntas y las estrategias recomendadas para resolver cómo tomar esas decisiones. Insistimos: no existen reglas fijas en el poker y cualquier patrón de conducta repetido se torna un arma de doble filo. Las estrategias y los patrones de apuestas recomendados en libros y sitios de internet son por lo general criteriosos y coherentes con los sistemas que proponen, pero también son demasiado conocidos por todos los jugadores de nivel medio e incluso por gran cantidad de principiantes. Al ser tan conocidos, son consejos que se vuelven en contra del buen juego y deben ser tomados como lo que son: recomendaciones generales para situaciones abstractas. Por eso debemos estudiarlos con atención, pero no sólo para aplicarlos cuando la situación sea la correcta y resulten una estrategia conveniente, sino tal vez sobre todo para reconocer cuándo un rival está jugando según los criterios de los manuales de poker más difundidos y así interpretar sus jugadas fácilmente.

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