TV SHOW
El mago no encontró la magia y perdió un pozo de US$323K
Antonio Esfandiari volvió a las mesas televisadas y a pesar de que sus poderes fallaron una vez, al final de la noche fue el máximo ganador.
Ser jugador de poker tiene muchas ventajas, sin embargo si se compara con un trabajo tradicional, hay ciertas carencias que aunque no son nada graves, valen la pena tener en consideración para no perder, por ejemplo, los beneficios financieros de pertenecer a una empresa pero con la comodidad de ser un profesional de las cartas.
Por mencionar algunas, las bonificaciones navideñas o aguinaldos son de esos aspectos que, en estas fechas, no reciben los jugadores. Sin importar qué tanto se gane o pierda en las mesas, existen algunos tips financieros que puede ayudar a organizar el flujo de caja durante los 12 meses para llegar a fin de año con esos mencionados beneficios.
Saber cuánto se tiene y cuánto se debe es fundamental para cualquier persona, por ello es muy importante organizar un presupuesto que incluya alimentación, alquiler, Internet, etc. Aunque estos pueden ser distintos para los jugadores online o en vivo, el estacionamiento del casino, las propinas a los dealers, la mensualidad del programa de estadísticas o una mayor velocidad de navegación son aspectos que se deben incluir en los gastos de operatividad del poker.
De igual manera, grandes profesionales del poker aconsejan hacer retiros cada tres o seis meses, incluso solo una vez al año. Las ganancias pueden ser tan variables mes a mes que tener un presupuesto tan ajustado puede ser contraproducente.
El conocido diezmo es una buena manera de ir ahorrando durante todo el año para luego poder gozar de lo que sería el equivalente a unas utilidades o aguinaldos así como un fondo de emergencia. De las ganancias que se reciben cada mes o después del cobro de un torneo, se debería sacar mínimo un 10% para estos apartados y obligarse a ajustar el presupuesto con el 90% restante. También vale la pena destacar que el orden de la ecuación debería ser de esa manera, es decir primero sacar lo correspondiente al ahorro. Si se deja este para lo último, posiblemente nunca alcance.
Ya se ha mencionado que las ganancias en el poker pueden ser muy variables, hasta los mejores jugadores cuentan cómo han tenido que atravesar por grandes lapsos de tiempos donde las cosas no salen bien o la racha perdedora se extiende. Usar parte de ese 10% que se viene ahorrando para construir un fondo de emergencia que permita hacer cara a los downswings es fundamental y así no tener que hacer retiros forzosos de la banca.
También hay que recordar que el poker no le otorga una póliza de seguro de vida a ningún jugador, por ello tener cubierta esta necesidad es importante para manejar cualquier imprevisto relacionado con la salud.
Pensar en el poker a largo plazo también incluye redistribuir las ganancias en un período similar. Aunque aplicar todos estos consejos en el último mes del año no tendrá grandes frutos, aprovechar para ejecutarlos desde el primer día del año que comenzará será de gran ayuda para llegar al próximo diciembre con números verdes no solo en las mesas sino en el presupuesto global de vida.