A pesar del auge que ha tenido el poker en México , muchas de las iniciativas y planes recientes se han encontrado con leyes y políticas antiguas que no permiten el surgimiento de las nuevas tendencias o formas de ver el juego.
Para entender el presente y hacia donde se puede ir, es necesario echar un vistazo al pasado para conocer cuales han sido los cimientos y bases, en este caso, de los juegos de azar y casinos en el país que han permitido o obstaculizado el desarrollo de esta industria que cada vez genera más dinero y atrae a nuevas generaciones.
La historia de los casinos en México nace a principios del siglo XX, más específicamente en el año 1907. El aquél entonces presidente, Porfirio Diaz , firmó un decreto autorizando los juegos de azar pero no fue sino 40 años más tarde, en 1947 cuando el gobierno promulgó la conocida Ley de Juegos y Sorteos.
Aunque dicha ley ha sufrido pequeñas modificaciones, es aquella antigua legislación la que en la actualidad sigue rigiendo la industria de los casinos y da a la Secretaría de la Gobernación la facultad para la emisión de licencias, supervisión y control de todos los juegos relacionados, incluyendo, en cierta medida, al poker.
Otro gran paso ocurrió en 2004 cuando la ley pasó a llamarse, Ley Federal de Juegos y Sorteos y se terminaron de sentar las bases para que el sector fuera completamente legal y controlado por el gobierno, lo que permitió, entre otras cosas, la inversión extranjera con la creación de nuevas salas y casinos en gran parte de la república.
Posteriormente, la última modificación se realizó en 2013, agregando algunas obligaciones fiscales a los operadores de juegos, sin embargo, se han demandado nuevos ajustes que aún no han sido ejecutados para permitir una mayor permisividad en algunos juegos y sus jugadores.
Años más tarde nació La Asociación Deportiva Nacional de Póker, A.C que logró que el poker fuera reconocido como deporte mental y afiliado, en 2017, a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte para así poder organizar y llevar a cabo torneos fuera de los casinos entre otros beneficios, sin embargo y hasta la fecha, varios episodios han trastabillado los planes de dicha asociación.
En cuanto al poker y casinos online, en 1996 se estableció la primera plataforma en línea del país y en 2014 fue incluida esta modalidad en la ley de juegos dándole un marco legar y de igual forma siendo controlada por la Secretaría de la Gobernación.
Aún así, desde hace años se habla de varios borradores y proyectos de ley que existen en diferentes entes gubernamentales para tratar de impulsar de manera activa tanto el poker presencial y online con normativas que aseguren y den tranquilidad a todos los actores de intervienen en la industria tanto a nivel nacional como internacional.