Uno de los personajes más enigmáticos del poker en la actualidad es Dan Cates y recientemente puso a valer su apodo de Jungleman con algunas confesiones hechas durante el reality Game of Gold de GGPoker.

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El estadounidense dio algunos detalles sobre un viaje que hizo a la selva de Costa Rica donde tuvo algunas vivencias psicodélicas en lo que se podría catalogar como una de las máximas experiencias de mental game que ha tenido algún profesional del poker.

El ritual de ayahuasca es ancestral.

Fue durante este programa que se emite por YouTube que Cates confesó sus aventuras. Por un momento, dejó de lado el libro «Sabiduría práctica: Para el buscador sincero» que había estado leyendo en varios episodios para comenzar a hablar del retiro realizado en el país de la pura vida, donde experimentó con la ayahuasca de la mano de chamanes especializados.

«Realmente hay mucho que decir sobre mi experiencia con la ayahuasca en Costa Rica», empezó Cates. Lo primero que nos hicieron hacer fue que tuvimos que dejar el azúcar durante dos semanas antes del viaje, también dejar la cafeína y la sal de mesa, así que, ya sabes, ya empezó difícil. Y luego, una vez que llegamos allí, pudimos hacer lo del veneno de rana», agregó Jungleman al revelar que además de la ayahuasca, antes hubo otra sustancia.

 

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El estadounidense siguió al contar su historia en la que narró que tuvieron que ponerse veneno de rana en la piel para purgar las toxinas, alg que según confesó, lo asustó mucho pues ya le habían advertido que en el proceso la gente suele sentirse mal y fue justo lo que le pasó. «Me enfermé mucho», dijo.

Pero la experiencia no quedó ahí. Después de eso, tuvieron que beber ayahuasca, una bebida utilizada en la medicina tradicional de pueblos indígenas en América Latina que es considerada como una droga alucinógena. Cates dio detalles de su trance.

«Tomas este líquido asqueroso y es algo así como LSD. No tuve un mal viaje en absoluto. Y sucedieron un montón de cosas dentro de mí. Cerré los ojos y me di cuenta de que se podía ver la Vía Láctea completa. Eso fue realmente asombroso.

Hubo otras cosas que sucedieron. Un ejemplo de lo que pasó: vi muchas formas que pasaron de ser algo hermoso, como el arte de la IA, insectos u otros tipos de animales extraños. Y me di cuenta de que está mostrando cómo todas las cosas están conectadas».

También confesó que más allá de «ser uno con una conciencia más amplia», lo que realmente produce la ayahuasca es que el individuo se enfrente a sus miedos en un viaje interior. Él tuvo que hacerle cara a los insectos que odia, a una chica que le gustaba en el pasado cuando era un chico tímido o un videojuego que le dio una gran lección a los 15 años.

Ahora falta ver si dicho viaje ha mejorado el desempeño de Cates en las mesas: de ser así, este camino podría convertirse en el próximo destino de muchos profesionales que quieran llevar su juego al siguiente nivel.