Las sesiones de poker, sobre todo presenciales de torneos, suelen durar muchas horas, en las que la concentración es clave. Por eso es necesario tratar de matizar el momento de alguna manera para que la cabeza mantenga su eje. Qué mejor, entonces, que apelar a la música para ayudar a relajarse en los momentos que se necesita. CodigoPoker, en ese sentido, te presenta (o recuerda) varias canciones para elegir.
Por supuesto, hay miles de posibilidades dependiendo el estilo que les guste. Sin embargo, lo acotamos a un Top 15 de canciones, digamos, gambling, cuyas letras o títulos tienen que ver con las apuestas, el juego, el poker… Y mezclamos estilos, naturalmente, porque la corriente que nos empuja es la actividad que elegimos diariamente. El orden es aleatorio, se aclara.
La llevó a la fama Lady Gaga en su álbum debut, The Fame, en el 2008. En realidad, su letra no tiene relación con las cartas, sino que la temática central es la bisexualidad y fue un tributo de Gaga a sus novios, amantes del rock and roll. En la misma línea, la letra describe a una mujer que le gusta provocar la excitación. Alcanza con el nombre para convertirse en un ícono de las cartas.
Atlantic City es, por supuesto, uno de los mayores paraísos de juego del mundo. «Hay ganadores y hay perdedores, y yo estoy al sur de la línea», escribe Bruce Springsteen. Se trata principalmente de un hombre de clase trabajadora con mala suerte, que se acerca al crimen organizado para llegar a fin de mes. Juego al 100%.
Una joyita de Bob Dylan, quien retrata a un apostador cualquiera que corría riesgos y vagaba de pueblo en pueblo por todo Estados Unidos, engendrando hijos y ganando todo lo que había en la mesa. El mensaje es claro: retírate mientras tengas ventaja. No suele suceder…
Nos sumergimos un poco en el punk de The Clash, la banda británica cuya obra más conocida es London Calling, disco del 79 al que pertenece esta canción. Básicamente, la letra apunta a un forastero jugador, alguien que hace trampa y no sigue las reglas con tal de ganar dinero. ¿Les hace acordar a alguien del presente?
Billy Joel le canta al Dinero Fácil, banda de sonido de la película que lleva el mismo nombre del tema, lanzada en el 83. Es una canción pegadiza que no se involucra en el juego, sino es todo un lema del que quiere tomar un atajo antes que el camino largo.
Típica de apuestas, pero en este caso se refiere a carrera de caballos. La obras es del grupo The Dubliners, naturalmente, de Irlanda.
¿Cuántas veces se habrá escuchado en los 80? Kenny Rogers ideó este clásico de la música country, un himno que debería sonar en todos los torneos.
Traducida como La Forma de mi Corazón, es la historia de un jugador de poker que juega no para ganar, sino para tratar de descubrir algo, una especie de autobiografía de Sting en pocos minutos de deliciosa melodía y voz. «Sé que las espadas son las espadas de un soldado. Sé que los tréboles son armas de guerra. Sé que los diamantes significan dinero para este arte, pero ésa no es la forma de mi corazón”, escribió el líder de The Police.
7 – Gambler’s Blues
Si la combinación es blues, un jugador y BB King, nada puede salir mal. Al contrario, sale otra canción para llevar siempre en nuestra playlist. En realidad, es una canción de amor, que en parte de la letra dice «no pretendo ser un jugador, no sé mucho sobre los dados». Aplica.
Sería como un all in en una relación de pareja esta canción, una de las más conocidas del grupo sueco ABBA. La letra muestra las reflexiones y sentimientos de una mujer tras la ruptura de una relación con las últimas palabras que tiene para él. Este tema viene incluido en el álbum Super Trouper, un éxito.
¿Cuántas bandas han escrito una canción titulada Rey de Corazones? En este caso tomamos la de Kiss, el grupo de caras pintadas que este año están haciendo su tour de despedida (y van…). Como la mayoría de las letras de la banda, habla de amor y sexo, nada de poker. «Justo entre sus ojos, yo soy el rey de corazones, viviendo en una fantasía, el rey de corazones».
Un clásico del heavy metal, este As de Espadas que inmortalizó Lemmy Kilmister con su voz ronca en Motorhead. Ya el primer párrafo avisa de qué trata: «Si te gusta apostar, te digo que yo soy tu hombre. Ganas algo, pierdes algo, para mí todo es lo mismo. El placer está en jugar. Da igual lo que digas, no comparto tu avaricia. La única carta que necesito es el as de espadas (o picas)».
Una de las más conocidas de AC/DC, una analogía a un juego del poker para transmitir la experiencia del extinto cantante Bon Scott contrayendo enfermedades venéreas. «Ella tenía un par guardado, pero tuve que intentarlo. Su par era salvaje, pero mi As era preciso. Aunque cómo iba yo a saber yo que ya le habían repartido antes». poesía pura.
Así es, los Rolling Stones no pueden faltar, más allá de que no se hace referencia al poker en esta letra, pero sí a que la banda frecuentaba regularmente los casinos de Montecarlo durante la grabación del álbum en el que aparece esta canción, el clásico Exile On Main Street.
Dan ganas de dejar las cartas en la mesa y acompañar en el estribillo a Elvis Presley con esta obra maravillosa, tres palabras que reflejan el sentimiento de un jugador en el corazón del mundo de las apuestas. ¡Viva!
Denle play…
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