El Aussie Millions de este año está entrando en su recta final y el día de ayer tuvo su punto final uno de los eventos más atractivos en su calendario: el High Roller Challenge con buy-in de cien mil dólares. Esta no es la primera vez que se realiza este evento en Australia y fueron 22 los jugadores que se animaron a participar, dieciséis menos que el año pasado, lo cual es un descenso considerable. A pesar de todo, la bolsa de premios alcanzó los $2,2 millones de dólares que se repartieron entre los mejores cuatro clasificados.

Como era de esperarse, y tal es la costumbre de los High Roller, hubo casi sólo jugadores de élite en este torneo. Por mencionar algunos: Sam Trickett, Jason Mercier, Daniel Negreanu, Erik Seidel, Sorel Mizzi, Tom Dwan, Daniel Cates, Phil Ivey, Gus Hansen y Patrik Antonius eran algunos de los rivales a vencer si uno quería llevarse el millón de dólares destinado al primer puesto.

El primer día del torneo terminó cuando quedó conformada la mesa final integrada por ocho jugadores y con Gus Hansen como líder con 567,000 fichas. Hansen se dio el lujo, además, de eliminar a Phil Ivey en noveno puesto y parecía un firme candidato para llevarse el título. Al día siguiente, sin embargo, las cosas no le salieron bien al danés y terminó siendo el bubble-boy, una posición muy dolorosa para un evento de este calibre.

En cuarta posición terminó Tony G cuando su A 6 no mejoró ante el A Q de quien sería eventualmente el campeón del torneo, Dan Smith. Joe Hachem abandonó el torneo en tercer lugar nuevamente a manos de Smith, quien aún así llegó al Heads-Up con una desventaja de fichas pero en las primeras manos logró un ansiado double-up.

El duelo final se alargó durante varias horas hasta que un flip decidió el título cuando el par de dos de Smith resistió ante el Q 6 de Mikhail Smirnov.

Así quedaron los cobros del High Roller del Aussie:

1. Dan Smith – AUD $1,012,000
2. Mikhail Smirnov – AUD $616,000
3. Joe Hachem – AUD $330,000
4. Tony G. – AUD $242,000