TV SHOW
El mago no encontró la magia y perdió un pozo de US$323K
Antonio Esfandiari volvió a las mesas televisadas y a pesar de que sus poderes fallaron una vez, al final de la noche fue el máximo ganador.
Las autoridades francesas arrestaron a dos hombres acusados de usar tecnología avanzada para hacer trampa en mesas de poker y casinos. Según informó el Daily Mail, los detenidos son un lituano de 37 años y un ucraniano de 63 años capturados el 28 de julio en el resort Enghien-les-Bains, conocido por su casino. Los sospechosos habrían ganado más de €200.000 en el poker y blackjack antes de ser aprehendidos. La policía había recibido una denuncia en junio y pasó semanas investigando hasta realizar el arresto. Stephan Piallat , jefe del Servicio Central de Carreras y Juegos de Francia, compartió más detalles con los medios.
«Estos individuos son apostadores muy experimentados con métodos cuidadosamente estudiados», explicó Piallat. «No estamos hablando de delincuentes comunes. Están claramente especializados en este tipo de crimen, moviéndose de un país a otro, atacando casinos y luego desapareciendo. Es el sueño de cualquier apostador, ganar a lo grande cada vez».
Los detenidos no tenían antecedentes criminales, pero en sus habitaciones de hotel se encontraron identidades falsas y tarjetas de varios casinos. Ambos están acusados de «fraude organizado en banda», aunque la policía todavía busca identificar a otros posibles cómplices.
En el podcast Only Friends, el conocido jugador de poker Matt Berkey discutió el caso, proporcionando detalles sobre el elaborado método de trampa. Rumores sobre esta técnica ya circulaban entre la comunidad de jugadores, con sospechas de fraudes similares en partidas de efectivo en las Bahamas y Las Vegas. Berkey explicó que uno de los tramposos, sentado preferentemente en los asientos 1 o 9 cerca del crupier, utilizaba una microcámara escondida en un protector de cartas, anillo, funda de celular o en la manga de una camisa. Este dispositivo capturaba imágenes de las cartas mientras el crupier las distribuía. Berkey mostró un ejemplo de cómo funcionaba este método en su podcast, ilustrado en la portada de este artículo.
Las imágenes eran enviadas a un cómplice fuera del casino, quien luego transmitía la información al jugador en la mesa mediante un microauricular oculto. El dispositivo era tan pequeño que se necesitó un imán para retirarlo de la oreja de uno de los arrestados. De esta forma, aunque el estafador no sabía qué cartas aparecerían en el board, podía ver la mayoría de las cartas de sus oponentes. Berkey mencionó haber sido víctima de este tipo de fraude y sugirió que, en lugar de prohibir dispositivos electrónicos, la mejor solución sería modificar la forma en que los crupieres reparten las cartas, manteniéndolas siempre pegadas al tapete y empujándolas hacia los jugadores.
La magnitud de esta estafa y su impacto en la comunidad de poker aún están por determinarse. Cabe señalar que este método es más difícil de aplicar en torneos, donde los jugadores no eligen sus asientos, complicando la obtención de imágenes de las cartas. Ahora que la técnica ha sido revelada por la policía y por Berkey, se espera que los jugadores estén más atentos a situaciones y dispositivos sospechosos en la mesa. En mesas televisadas, por ejemplo, es común prohibir el uso de celulares y auriculares, lo que impediría este tipo de fraude.