A medida que se van conociendo las pautas para restablecer las actividades en los casinos del todo el mundo, en materia de sanidad comienzan a surgir otras interrogantes y una de ellas es sobre el humo del tabaco y vaporizadores junto con el riesgo relacionado con virus como el COVID-19.

Por ejemplo, la Junta de Control de Juego en Nevada no se ocupó de tratar este tema, situación que preocupa a algunos doctores al considerar que podría tener implicaciones directas en los sistemas respiratorios, que han sido el principal foco de complicaciones en los pacientes que se han contagiado con el coronavirus.

En ese sentido, doctores de la Universidad de Roseman como la doctora Christina Madison aseguran que «cualquier tipo de toxina ambiental que incluya humo podría ponerlo en riesgo de sufrir una enfermedad respiratoria, cualquier cosa que dañe el tejido pulmonar o que pueda ponerlo en riesgo de contraer un patógeno respiratorio no es una buena idea».

Sin embargo se considera que el fumar está relacionado con el placer para algunos clientes y este hecho influye financieramente de manera directa en casinos. Para David Schwartz, profesor e historiador de juegos de UNLV, el hábito de fumar antes se relacionaba directamente con el juego y las iniciativa de casinos libres de humo en algunas parte no ha tenido tanto éxito o ha impactado de forma directa en los ingresos de los casinos.

También la doctora Madison considera que el enfoque de salud que se está viviendo en la actualidad puede otorgar licencias para restringir el uso del tabaco: «Creo que esto realmente los ayudará a hacer esa transición sin tantos retrocesos como creo que hubieran tenido de otra manera». 

En el caso de Nevada , la ley establece espacios libres de humo y algunos permisos en ese sentido en áreas como las mesas de poker. Por otra parte, países como Argentina  lo tienen totalmente prohibido mientras que en México se han comenzado a tomar algunas iniciativas individuales para proporcionar mesas de fumadores o no fumadores en cash y torneos.

Habrá que ver si lo que se ha comenzado a llamar «la nueva normalidad luego de la pandemia» influye de alguna manera en este aspecto.