La situación de pandemia actual ha afectado a miles de personas en distintos ámbitos de la vida y las líneas telefónicas de ayuda en México han registrado una situación inusual al recibir miles de llamadas de personas deprimidas por el cierre de casinos.

Los más de 5 meses de encierro producto del COVID-19 han disparado los índices de estrés y ansiedad en la población, y entre ellos se encuentran las personas que padecen de algún grado de ludopatía. Este grupo ha visto cómo su principal actividad de entretenimiento se ha visto suspendida en su totalidad y sin un panorama claro para el futuro.

Un reciente reporte del Centro de Control de Adicciones en Cancún indica que el número de emergencias 911 ha recibido entre abril y junio más de 2.800 llamadas de personas que afirmaron encontrarse en depresión por el cierre de los casinos.

Del mismo modo, los grupos de especialistas encargados en canalizar y atender a estas personas han sufrido un incremento de pacientes. Además ha registrado un aumento en consumos compulsivos tales como el uso excesivo de alcohol y tabaco, cambios de humor repentinos e insomnio para buscar aliviar los síntomas de este mal.

«Otro porcentaje importante de ellos sufre de ansiedad, depresión y conductas agresivas que está afectando su dinámica familiar. Una consulta virtual o llamada telefónica no siempre es la respuesta, ya que lo más efectivo para atenderlos es el trato en persona. Se está creando una bomba de tiempo con esta situación, que sin duda va a golpear duramente a miles de familias en el Estado», dijo la psicóloga Cinthya Rodríguez Vargas a un medio local en Quintana Roo.

Otro agravante que se le suma a la situación es que gracias a las restricciones y contingencia sanitaria se ha dificultado tratar a los pacientes de manera correcta y más si se tiene en consideración que la ludopatía en México aún no es tratada como un tema de salud pública.

El tema de las apuestas electrónicas también preocupa, pues según Vargas están teniendo pacientes que han perdido cerca de US$1,500 durante el último mes en los llamados casinos virtuales. Sin números oficiales, en el país azteca se registran cerca de 2 millones de personas que sufren de ludopatía aunque los especialistas afirman que puede ser un número aún mayor porque solo tres de cada 10 personas adictas al juego buscan ayuda.