Si luego del chop poker pensaste que lo habías visto todo, entonces te equivocaste. Hoy les presentamos la sensación del año, el Tombstone Hold’em Poker.

Si querías llevar tus partidas a otro nivel, esta nueva y alocada modalidad de poker puede ser lo tuyo.
¿Lo sacaron de las partidas de cash del Undertaker? No, para nada, lo inventó un diseñador de videojuegos llamado Jane McGonial y su idea ya tiene cultores en varias partes del mundo.

Necesitamos: cartas, dos jugadores y un cementerio. Como vemos, nada que no tengamos a mano. Pues bien, ya con los implementos no nos queda más que decir que Shuffle up and dig, perdón, deal…

Más claro, echarle tierra.

Cada tumba es una carta… Sí, tal como leíste. Cada lápida es una carta en especial que se determina por fecha de muerte más su forma. Es así como alguien que murió en el 1984, su carta será un 4 u otro que murió en el 2001, su carta será un as.

Ahora bien, los palos se definirán según la forma de la lápida, es decir: si se encuentra una de punta, entonces es una carta de picas; si encontramos una estatua, entonces la carta es de tréboles; si la forma es redonda, la carta será de corazones; mientras que si la piedra es cuadrada, la carta será de tréboles.

¡Y el holdem se juega con dos cartas! Pues bien, tienes que elegir dos lápidas, y mantener contacto con ellas. ¿Cómo? ¡Como sea posible! La pareja debe mantener contacto físico entre sí y ser, al mismo tiempo, capaz de tocar las lápidas elegidas.

«Los que practican el Tombstone Hold’em serán capaces de pensar en la muerte y en sus seres queridos desaparecidos de una manera más positiva», señaló su creador. ¿Y el board? Bueno, eso es lo simple: se tira con cartas normales desde una baraja común y silvestre.

¿Te animas a una partida?