Los bots en el poker siguen representando el mayor reto para los operadores del poker online desde hace varios años pero ahora pareciera que han dado algunos pasos para usar esta problemática a su favor.

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De unos cuantos años para acá, las principales salas en línea han fichado a jugadores profesionales para incorporarlos a sus departamentos de seguridad con el fin de usar su experiencia y ojos críticos para detectar a los tramposos y softwares maliciosos, sin embargo esto parece que aún no es suficiente contra los avances tecnológicos y evolución de los bots.

Hay un dicho que reza: «Si no puedes contra el enemigo, únetele». Esto pareciera que fue justo lo que trató de implementar una de las más reconocidas salas en Estados Unidos  al lanzar su «Bot Challenge», sin embargo el ruido que hizo entre la comunidad en redes sociales hizo que se tuviera que retirar el desafío a pesar de ser el siguiente paso para combatir este problema.

¿Los bots pueden ayudar al poker online?

Utilizar la causa del problema para blindar al sistema es una práctica muy utilizada en otros aspectos de la vida. Por ejemplo, se han conocido varias historias donde el FBI convierte en aliados a antiguos delincuentes y los contrata para que los ayuden a resolver otros casos.

La idea de que las salas de poker desarrollen sus propios bots para probar los sistemas de seguridad o invitar a la comunidad a que exponga las vulnerabilidades que han encontrado no parece tan descabellada aunque genere polémica y algunos daños colaterales.

Por otro lado, si éste no fuera el camino correcto, deberían inventar uno nuevo porque lo que pareciera que sí ha quedado demostrado es que la forma que se tiene hasta ahora para combatir a los bots, está quedando obsoleta, más si se tiene en consideración el desarrollo que están teniendo los proyectos de Inteligencia Artificial (IA).

Habrá que esperar a ver qué nuevos avances muestran los operadores online contra esta problemática, más tomando en cuenta el crecimiento que viene experimentando la industria del poker y que podría terminar desalentando a los nuevos jugadores o incluso haciendo que se impongan nuevas regulaciones al sector por parte de los países.