Con una interesante evolución de su juego, que ha dejado en evidencia con buenos resultados en los multitudinarios torneos de PokerStars, el cafetero John Sarmiento empieza a dar a conocer sus cualidades como un prometedor talento de la armada tricolor. El último jueves, Sarmiento, identificado en las pantallas como Add-John, finalizó como runner-up del Bounty Builder $215. Su figuración, que le permitió alcanzar utilidades por unos 6.300 dólares, se convirtió en la mejor que ha tenido en la sala de la pica roja.
El criollo cayó en la definición con el teutón HhCMotU , de modo que tuvo que conformarse con un premio de 4.896 dólares por su subtítulo, además de una bonificación de 1.406 dólares por los oponentes a los que despojó de sus últimas fichas. El campeón obtuvo 6.530 americanos por su victoria y 4.324 más por los rivales de los que fue verdugo. El podio se completó con el británico blueyez22149 , lucrado con 3.672 verdes por su tercer lugar y 1.071 por recompensas.
El certamen reunió un field de 319 contendientes, que generaron un recaudo de 63.800 dólares. La mitad del pozo sirvió para premiar a los 36 primeros de la clasificación, mientras que los 31.900 americanos restantes correspondieron a los pagos que recibió cada jugador por las eliminaciones de las que se hizo cargo.
John, nacido en Bogotá , pero con un acento que delata su crianza en Pereira , avanzó hasta el heads up del exigente certamen, luego de haber conseguido su asiento a través de un satélite clasificatorio de 22 dólares, como lo dio a conocer en amplia conversación con nuestra redacción: “Desde que empezó el torneo tuve siempre un buen stack. Nunca tuve situaciones que me pusieran en riesgo de quedar eliminado. Incluso, llegué a ser chipleader en una etapa ya avanzada, hasta el momento en el que quedaban unos 25 jugadores”, contó a manera de resumen, para ir dando después los detalles.
Esa solidez se afirmó en el momento en que la varianza puso a favor suyo un spot que le era más que adverso: “Me catapultó una mano en la que tenía AJ y estaba dominado por el AQ del oponente. En el flop vinieron 4-J-Q. Él c-beteó y yo igualé. Al turn llegó un 7. El rival envió un segundo barril muy grande y decidí cubrir. Al river bajó la J y él se jugó sus restos. Obviamente cubrí y me llevé un pozo muy importante cuando quedábamos unos 60 jugadores. En ese momento estaba en el promedio y logré escalar hasta el top 3”, relata John, en tono vibrante.
De la misma manera que la fortuna le dio esa mano, Sarmiento también sufrió la adversidad de la suerte en otras que le habrían podido generar una rentabilidad mucho mayor de la que consiguió: “Aunque eliminé a 8 oponentes, pude haber ganado mucho más por recompensas. Una mano por un bounty de casi 700 dólares, se me escapó en el river, cuando el rival completó una escalera. Él tenía J9 y al flop llegaron K y Q. Yo iba adelante con mi AQ y a él le llegó el 10, que era su única opción, en la quinta carta. En la mesa final tuve 3 manos en las que estuve all in contra oponentes distintos, buscando ganar sus bounties, que eran de 600 dólares cada uno, en promedio, y los tres se me escaparon”, confiesa el grinder.
A medida que avanzó hacia la definición del torneo, Sarmiento se encontró siempre con la misma suerte esquiva que le impidió finalizar en la cima del podio: “Desde que quedábamos 3 mesas hasta la conformación de la mesa final, me encontré continuamente en muchas manos con el rival que terminé en el heads up. Volví a estar como chipleader al entrar a la mesa final, pero el alemán fue mi némesis; me ganó prácticamente todas las manos que jugamos”, señala el entrevistado.
El desenlace de ese torneo, le da la razón a esa afirmación de John: “Cuando iniciamos el heads up, mi rival está 1 millón de fichas arriba. Me mantuve concentrado y logré equilibrarlo. Después volví a bajar y terminé perdiéndolo en una mano en la que me juego con par de 5 y el oponente recibió con par de jacks. Lo intenté pero no encontré la manera de ganarlo”, concluyó el matecaña.
Al preguntarle por su experiencia en la sala de las estrellas del poker, el jugador mostró un corto pero interesante expediente: “Llevó unos 8 meses jugando en PokerStars. Antes jugaba poker en partidas caseras, con amigos. Desde que juego online, me ha ido bastante bien en los Bounty Builders. El primer torneo en el que tuve un buen cobro en PokerStars fue un Saturday Splash. Ahí quedé de tercero y cobré 4.800 dólares. En los últimos meses, logré también un segundo puesto en el Bounty Builder $44. También salí tercero una vez y cuarto en otra, en el Bounty Builder $33. Por eso digo que mi fuerte son estos torneos”, afirmó con certeza.
Esos buenos cobros, han llevado a John a pensar en aventuras mayores, en el ámbito de las competencias presenciales internacionales: “Llevo poco en torneos en vivo, pero voy a empezar a participar en algunos. De hecho, voy a tener una oportunidad muy importante por estos días, al competir en el Jackie’s Poker Tour, en el Sortis, de Panamá. Estaré allá desde el miércoles”, anunció el héroe.
En cuanto a su formación en esta disciplina mental, Sarmiento no quiso extenderse demasiado. Simplemente mencionó a un reconocido de la armada tricolor como competidor que le ha servido de imagen: “Un jugador al que tomo como referente es Daniel Ramírez , dramir100. Hemos tenido algunas conversaciones, en las que me ha brindado consejos. Cuando puedo, trato de ver manos suyas en los torneos. Es una persona que ha influido en mi estilo y del que he aprendido bastante”, admitió el escolta del Bounty Builder $215.
Previo a su viaje a tierras canaleras, donde esperamos que John confirme sus virtudes en la práctica del juego ciencia del siglo XXI, el de La Perla del Otún sigue empeñado en lograr nuevas proezas en las mesas virtuales. Este domingo, Add-John fue el colombiano mejor ubicado en el Sunday Million, al cerrar su participación en la casilla número 100. Su actuación, que supuso dejar atrás a más de 5.000 contendores, le generó un ingreso ligeramente superior a los mil dólares. De nuevo, la varianza fue severa con sus intereses: “Tuve una mano en la que quedé jugado con pareja de reyes en mano, contra pareja de ases del oponente. Ahí perdí más de la mitad de mis fichas y fue imposible recuperarme”, contó el grinder del que esperamos noticias más positivas en Panamá.