Spencer Cossette no es un nombre muy famoso en el mundo del poker. No ha ganado brazaletes ni torneos. Pero ha logrado una hazaña al alcance de muy pocos: tiene dos Porsches  adquiridos a través de la Tienda de PokerStars y por cuales pagó nada más que con FPP. «Tenía varios millones de puntos de jugador frecuente así que decidí darles un buen uso», declaró Cossette al blog de PokerStars.

La historia de Spencer es bastante sorprendente: en 2005 depositó $50 dólares en su cuenta y desde entonces no volvió a usar su tarjeta para depositar dinero en la sala. Su evolución fue siempre notable y desde aquel entonces ha alcanzado el estatus de Supernova Elite, el más alto de PokerStars, en tres ocasiones. Su especialidad son los Sit&Go y los juega todos: mesa completa, <em>shorthanded</em> y Heads-Up. «Me gusta saber que puedo detenerme cuando lo desee. No entiendo como hay quienes pueden jugar un torneo multimesa y estar frente a la computadora diez horas seguidas», explicó.

Spencer dijo que había conseguido el primer Porsche como una motivación para jugar más y que era una especie de recompensa por todo el trabajo invertido en las mesas. Cuando llegó a los  millones de puntos requeridos pidió el Porsche Cayman pero poco después decidió regalárselo a sus padres.

Sin embargo, a Spencer no le tomó mucho tiempo para volver a ocupar el espacio en su garage y gasto otros cinco millones de FPP en un Porsche Panamera que, inclusive él mismo admitió, pasa más tiempo estacionado que en movimiento. «El tráfico afuera de mi departamento es terrible», afirmó pero además parece que al muchacho le gusta viajar y en los últimos seis meses estuvo en Madrid, Las Vegas, Mozambique, Colombia, Argentina, Chile y hasta las Islas Caimán…

Para que luego digan que el poker no paga dividendos…