URUGUAY
Peuvrie, Walter y Waigel dominaron el Main Event del Enjoy Poker Tour
Ellos fueron los mejores del Día 1C y 1D, respectivamente, a la espera del Día 1E y Día 2 que se juega este sábado en el Enjoy Punta del Este.
Niklas Astedt , conocido por muchos en el mundo del poker como la leyenda en línea bajo el nick Lena900, logró un hito verdaderamente histórico al superar los 45 millones de dólares en premios en torneos digitales. Este hito consolida aún más su estatus como uno de los grinders más exitosos de este deporte mental, particularmente en el ámbito virtual.
Según PokerStake (anteriormente conocido como PocketFives), Astedt lidera cómodamente la lista de los jugadores con mayores ganancias online, con su más cercano competidor, el también sueco Simon Mattsson , distante en el segundo lugar con sólo 32 millones de dólares en premios. Chris Moorman completa el podio con US$23.306.262.
Sin embargo, es importante señalar que PokerStake sólo tiene en cuenta los apodos registrados por los jugadores, lo que significa que muchos optan por mantener en privado algunos de sus logros y cuentas.
El grueso de las ganancias de Astedt se concentra en diversas plataformas. En GGPoker, bajo su nombre real, ha acumulado una impresionante suma de 19.1 millones de dólares. En PokerStars, donde es conocido como Lena900, suma alrededor de US$16.5 millones. Además, en 888poker, bajo el apodo tutten7, superó la marca del millón de dólares.
A pesar de su destacada carrera en línea, Astedt no cuenta con ganancias de siete cifras registradas en la plataforma, pero su consistencia es innegable, con un promedio de 4.051 dólares por premio en 11.141 resultados. Su mayor éxito se produjo en el 2021 cuando conquistó el Evento Principal del Super Circuit de la WSOP por US$762.253.
El logro de Astedt es un testimonio de su habilidad y dedicación en el mundo de las cartas virtuales, y su nombre permanecerá en la historia como uno de los jugadores más exitosos y respetados en la escena en línea. ¿Habrá alguien que lo supere y esté oculto? ¿Quién sabe?