Las que comenzaron como algunas medidas temporales en España durante el confinamiento de la pandemia se han ido convirtiendo en leyes permanentes y ahora parecen ir en escalada con una nueva iniciativa que busca poner tope a los montos que se podrán depositar en las salas y sitios de apuestas.

El gobierno español, a través del Ministerio de Consumo, ha anunciado planes para modificar la Ley de Regulación del Juego con el objetivo de limitar el gasto en dichas actividades. Según esta nueva regulación, los usuarios podrán gastar un máximo de €600 al día o €1.500 a la semana en apuestas.

Alberto Garzón Espinosa, ministro de Consumo del Gobierno de España.

Esta medida representa un cambio significativo con respecto a la normativa vigente, que establecía límites en los depósitos de los jugadores, pero de forma separada para cada operador. La nueva propuesta considerará el gasto acumulado en todas las compañías en las que el usuario tenga una cuenta abierta.

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Es importante destacar que los usuarios tendrán la posibilidad de ajustar o incluso eliminar estos límites económicos en sus depósitos, pero para hacerlo, deberán realizar una solicitud y esperar un período de siete días para que la modificación surta efecto.

El Ministerio de Consumo ha explicado que esta medida tiene como «objetivo principal aumentar la protección de los participantes en juegos de azar» y proporcionar a los usuarios herramientas adicionales para gestionar de manera responsable su gasto en apuestas.

Además de las restricciones en los límites de gasto, el proyecto de ley también prohíbe a los operadores de juego utilizar hipotecas sobre propiedades en España como garantía para obtener una licencia, como se permitía anteriormente. Ahora, solo se aceptarán garantías en forma de dinero en efectivo, avales bancarios o de sociedades de garantía recíproca, o seguros de caución otorgados por aseguradoras autorizadas.

Otra modificación relevante es el aumento en el valor de las licencias, autorizaciones y registros de juego que los operadores deberán proporcionar. A partir del 1 de enero de 2025, se requerirá una garantía de €2.4 millones en lugar de los €2 millones previos. En el caso de concursos, ya sean televisivos, radiofónicos o en línea, la garantía oscilará entre €500.000 y €600.000.

Estas medidas representan un paso importante hacia una regulación más estricta del juego en el país ibérico, con el objetivo de proteger a los jugadores y garantizar la integridad del mercado. La limitación en los gastos y las nuevas garantías financieras buscan prevenir problemas de adicción al juego y promover una industria más responsable.