Inicio > La Mesa Final del European Poker Tour Mónaco estuvo llena de historias

El sábado anterior finalizó la décima temporada del PokerStars.com European Poker Tour con el triunfo del italiano Antonio Bounanno Flag of Italia después de vencer al británico Jack Salter Flag of Reino Unido en una épica mesa final que tuvo muchas historias paralelas, en gran medida, al maratónico heads-up que se vivió.

La primera historia es cortesía del alemán de 23 años Sebastian Bredthauer Flag of Alemania quien logró clasificarse a la Grand Final del European Poker Tour gracias a 100 FPP’s. Así es, el joven teutón quien aún se encuentra en la universidad invirtió 100 puntos en un Step 1 lo cual poco a poco lo llevó al clasificatorio de €770 que lo traslado a Mónaco. De hecho la historia llamó tanto la atención que Christoph Vogelsang Flag of Alemania le ofreció una gran suma de dinero por una parte de la acción del torneo a su compatriota. ¿La respuesta? Sebastian se negó.

El desempeño del colombiano Mayu Roca Flag of Colombia tuvo a Latinoamérica al borde de la mesa durante varias horas y es que el jugador cafetalero era firme candidato para llevarse el título del serial europeo. Lamentablemente la suerte influyó negativamente y Roca quedó eliminado a manos del que eventualmente sería el runner-up del torneo. A pesar de ello Mayu ya escribió su nombre en la historia del poker latino con una actuación que será muy difícil de olvidar.

Al quedar tres jugadores se discutió la posibilidad de un acuerdo sin embargo no se llevó a cabo debido a que Bounanno al parecer pedía más dinero del que le tocaba situación que no agradó ni un poco a Jack Salter quien se negó rotundamente. Al paso de los niveles la historia dio un giro cuando Bounanno se acercó a Salter para explicarle que él lo que quería era darle más dinero por fuera ya que en ese momento este tenía una amplia ventaja en fichas sobre sus oponentes. Salter, quien por cierto ya había reclamado fuertemente al italiano llamándolo «avaricioso» no hizo más que aceptar su error.

La historia de los acuerdos en la mesa final no terminó en ese momento pues al quedar dos jugadores era bastante obvio que Salter ya no tenía muchas ganas de jugar, sin embargo la decisión no dependía totalmente de él pues tanto Ami Barer Flag of Canadá como Martin Finger Flag of Alemania se negaron a que el británico hiciera un deal ofreciéndole una buena suma por parte de su acción en el heads-up. Cabe resaltar que esto cambió la actitud del jugador inglés quien por cierto, se negó a continuar jugando hasta estrechar manos con Finger quien disputaba un torneo paralelo del EPT.

La nota negativa la dieron los amigos del británico, quienes por cierto suman varios millones de dólares en ganancias entre ellos, pues se burlaban del jugador italiano quien simplemente se mantenía serio. De hecho fue tan mala la actitud de estos que en algún momento uno de ellos fue directamente frente a la novia de Bounanno a festejar una mano, situación que provocó que el staff del torneo tuviera que dejar a uno de sus miembros junto a ella por el resto de la competencia.

La buena suerte siempre acompaño al italiano quien mandó sus fichas al centro solo para encontrarse con que iba en desventaja. Para su fortuna las cartas que necesitaba salieron en el board permitiéndole doblarse en cuestión de minutos y superar en fichas a Salter quien a partir de ese momento anunciaba su all-in formando un triángulo con sus manos debido a que en el EPT cuando un jugador se juega por todas sus fichas se le coloca un triángulo negro con rojo.

Al pasar de las manos el rail de Salter iba perdiendo fuerza y es que la mesa final fue tan larga que uno de ellos completó un círculo no muy digno pues pasó de estar sobrio a estar tomado, a estar muy tomado, a sufrir los estragos de beber mucho, a los malestares propios de la mañana post fiesta solamente para encontrarse sobrio de nuevo. Digno de contarle a los nietos ¿no?

La realidad es que justo o no, el italiano supo defenderse hasta el último momento aunque ese pequeño factor suerte siempre estuvo de su lado. Bounanno al ver la carta final de la última mano gritó para festejar mientras que un silencio bastante inusual llenaba la sala, al final tanto el italiano como el británico se felicitaron mutuamente dejando atrás cualquier diferencia.

Sin duda fue una mesa final llena de historias que pusieron ese extra para hacerla memorable. Por el momento el European Poker Tour se tomará un descanso regresando a las acciones el próximo 16 de agosto con el European Poker Tour Barcelona.

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