Los argentinos la rompieron en los altos torneos de recompensa progresiva. Leo fue subcampeón en el tradicional High Roller, mientras que Ignacio impuso su gran momento y se quedó con el de 109 dólares de inscripción.

Cuatro de los más reconocidos jugadores de esta parte del mundo comandaron una expedición a los torneos más caros de la sala de la pica roja. Tras durísimos enfrentamientos, todos terminaron con enormes premios.

El Players Championship en Bahamas estaba por romper la barrera de cobros cuando el argentino, algo corto, puso todo su resto con la mejor mano posible. Pero le pagaron con QQ y la quinta carta resultó letal.