Una controversia ha sacudido recientemente el escenario de los torneos high stakes en la World Series of Poker. La inscripción en el registro tardío al límite del tiempo permitido ha sido el centro del debate entre las estrellas del poker mundial, lo que generó tensiones y frustraciones.

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El problema surgió debido a la demora que enfrentan los grinders que realizan el buy-in en el último momento permitido. La considerable distancia entre la caja en el hotel Paris y el salón de eventos en el hotel Horseshoe agrava la situación. El pro Chris Brewer expresó su descontento en Twitter, donde señaló que los jugadores que compraban su entrada al final del tiempo disponible sólo lograban ingresar al torneo una o dos niveles después del cierre del registro debido al proceso de recibir fichas, presentar documentos y sentarse en la mesa.

Las colas de la WSOP son una constante en los torneos con gran convocatoria.

Ante el aumento de las quejas, la WSOP emitió un comunicado: «Los jugadores deben estar registrados y presentes en la fila del registro tardío cuando el registro cierre o su entrada será anulada y reembolsada», declararon en la plataforma X para los torneos con buy-in superiores a US$10.000. Sin embargo, a pesar de esta advertencia, el Día 2 del Evento #26 US$25.000 High Roller 8-Max estuvo marcado por una gran confusión.

El latino Rafael Moraes , quien casi se vio afectado, relató que llegó a la fila 40 minutos antes del cierre del registro y que esta avanzaba lentamente. Recibió su boleto a las 12:58 y tuvo que correr para llegar a tiempo para el máximo registro tardío a las 13. La organización le informó que sería el último en entrar al torneo, aunque muchos jugadores estaban aún en la fila de pago.

«Pasaron 30 segundos y llegaron Brian Rast y otros tres o cuatro jugadores regulares», comentó Moraes en Instagram. Estos jugadores fueron excluidos del torneo y no lograron revertir la decisión. Sean Winter , otro de los jugadores afectados, informó en Twitter que seis jugadores fueron impedidos de entrar.

«No estábamos tratando de obtener ventaja», escribió Winter. Explicó que todos estaban en la fila desde las 12:40, pero no pudieron inscribirse ni participar en el torneo. Stoyan Madanzhiev , otro jugador excluido, lamentó la situación y señaló que las máquinas automáticas de inscripción tenían problemas para imprimir los tickets de buy-in.

Algunos jugadores sugieren una solución simple: introducir un intervalo justo después del cierre del registro tardío. «Es un problema muy serio de integridad y muy fácil de resolver», sentenció el pro Isaac Haxton .