La World Series of Poker es más que un festival. Es el lugar donde las emociones corren paralelas al dinero, o más lejos aún en ciertos casos. Porque, pensándolo bien, pocos lugares y momentos menos redituables al bolsillo deben existir en el plano pokeril. Lo mismo que no debe haber mejor lugar para estar que en Las Vegas durante la WSOP.

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Valga la contradicción, solo basta ver las caras del que gana un brazalete. Los abrazos de quienes salen despedidos del riel, como ocurrió recientemente cuando Julio Belluscio , más conocido como Bartolo, obtuvo su pulsera. Aunque tampoco hay que irse tan lejos. Pocos momentos comparables en ese sentido tiene la burbuja del Main Event, con más de mil jugadores esperando que se abra la lista de cobros, para dejar salir la emoción del deber cumplido cuando, en realidad, la ganancia tampoco es tanta. Sin embargo, ese llegar a la primera meta significa mucho más que 5.000 dólares. Y ni hablar si no se disfruta en soledad.

Esto ocurrió con los Botfeld, David y Amanda, papá e hija, que no ocultaron su emoción cuando se rompió la burbuja y ellos estaban dentro de los que seguían con vida.

«¡Lo hicimos! Papá y yo estamos ITM», comunicó Amanda en un primer tuit. Luego continuó el hilo informando que, para el dinner break, todavía seguían en pie. Ella estaba mejor acomodada, con 672K mientras el surfeaba la ola con 176K

Familia pokeril en la WSOP

La historia de ellos puede ser la de cualquier padre e hijo, madre e hija o la combinación que ustedes prefieran. Probablemente se haya iniciado en partidas  caseras cuando ella le acomodaba las fichas a papá, y más tarde continuó como él de coach de su hija.

De hecho, ella posteó una foto cuando tenía 13 años y recibía lecciones de su padre…

También agregó otra imagen, titulándola de «irreal», de la WSOP 2021 cuando compartieron el evento en pareja,el Tag Team, en el que llegaron al tercer lugar.

Finalmente, esta historia de amor familiar, terminó en las mesas del Main Event cuando David quedó eliminado en el puesto 1.160° con un premio de 17.500 verdes. Amanda, quien además escribió un libro y ahora enseña a otras personas, como hacía su padre con ella, pasó al Día 5 con 910.000 puntos en fichas en el puesto 290°.

Más allá de que estén separados por la varianza, se sabe que es solo circunstancial. Porque, mientras allá poker y WSOP, siempre estarán juntos…

Amanda y su libro, con Sean McCormack.