El interrogante de si es conveniente arriesgarlo todo con la mejor mano durante los primeros minutos del Main Event ha sido discutido innumerable cantidad de veces por los jugadores.

Marc Goone sacó provecho de sus ases.

Se podría afirmar casi de manera consensuada que el Evento Principal de una WSOP es el torneo más importante en el que cualquier jugador puede sentarse ya que, más allá de que existan otros premios de mayor cantidad, obtener este brazalete es un pase directo a la inmortalidad en los libros de poker.

• Te puede interesar:
  ¿La WSOP amenazó a los jugadores si publicaban esta foto?

Aunque para los jugadores de altas apuestas destinar US$10.000 a la entrada de un evento puede significar algo menor, muchos otros logran acceder a este Main Event vía satélites, vendiendo acciones o en algunos casos «reuniendo para cumplir el sueño». Lo cierto es que con una estructura que permite una sola entrada y casi 365 días de distancia para poder tener otra oportunidad, hay que pensar muy bien las decisiones en las mesas.

Recibir ases preflop es la mejor mano del poker, sin embargo cualquier cosa puede pasar a lo largo de las 5 cartas del board. Aunque las probabilidades de salir vencedores son altas, se trata de un juego con gran peso estadístico y muchas veces se puede caer en el porcentaje perdedor.

Esta WSOP 2022 mostró una situación en la que este interrogante apareció en la cabeza de Marc Goone cuando vio A A al mismo tiempo que escuchó el all-in en la mesa a solo 15 minutos de haber comenzado el Evento Principal. En la otra esquina se encontraba Dennis Brand , quien con K K decidió arriesgarlo todo.

Luego de tomarse un tiempo prudencial para pensar la situación, Goone decidió pagar. Finalmente el board no mostró ninguna sorpresa y Brand tuvo que ser uno de los primeros en despedirse de la esta edición.