En una conversación profunda y reveladora con Dan “Jungleman” Cates , el británico Owen Messere , más conocido como ‘Pr0digy’, expuso por qué su nombre resuena con fuerza como uno de los mejores jugadores de poker No-Limit del mundo. No solo por su victoria en el Cash Game World Championship, donde ganó con una asombrosa tasa de 14 big blinds cada 100 manos, sino por su forma de pensar el juego: lógica, adaptativa y filosóficamente cargada.

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Uno de los momentos más comentados fue su legendaria mano contra el mismo Jungleman, donde logró pagar con As alto tras una lectura precisa del contexto, la imagen y el patrón de apuestas. Messere no lo atribuye a un soul read místico, sino a entender cómo las personas piensan el poker y qué errores cometen de forma sistemática.

También destacó que su ventaja en la serie se dio por exprimir al máximo sus edges contra jugadores más débiles, algo que, según él, muchos top regs no hacen lo suficientemente bien. “Vi a Linus dejar escapar situaciones claras contra rivales flojos. Ahí fue donde me despegaba del resto”, afirmó.

Messere valora más la observación individual que los patrones poblacionales. Ha estudiado a jugadores como Stefan, Daniel Soltis y Davy Jones, descubriendo en ellos estilos tan extremos que le permitieron fortalecerse al contrarrestarlos. “Después de jugar contra alguien tan agresivo como Soltis, volver a enfrentarte a otros se siente relajante”, comentó. “A veces tienes que defenderte sin tener suficientes manos fuertes. Eso me enseñó a maniobrar en spots incómodos.”

Estrategia, presión y el metajuego según Owen Messere

Owen prefiere líneas que obliguen a sus rivales a cometer errores más adelante en la mano. Por eso, ha abandonado las estrategias de apuestas de rango fijo (range bet) en muchos boards marginales y ahora prefiere enfoques más polarizados. Aunque eso implique cometer más errores teóricos, cree que los yerros de sus rivales serán más costosos.

El británico también es consciente del metajuego y la necesidad de proyectar una imagen atractiva para acceder a juegos privados y conseguir acción. “A nadie le gusta jugar contra alguien que solo espera ases”, dijo entre risas, aludiendo a cómo su estilo agresivo también lo ayuda a generar oportunidades fuera del GTO.

Durante el podcast, Jungleman llevó la charla hacia la espiritualidad. Aunque Messere no se considera particularmente espiritual, sí cree en la introspección, en desafiarse constantemente y en aprender de los errores. Además, lidera un Coaching For Profit (CFP) exclusivo para jugadores que ya baten niveles altos y buscan ese empujón final hacia la élite.

No busco que mis alumnos lo hagan perfecto la primera vez. Prefiero quienes fallan, prueban y ajustan. Ahí está el crecimiento.

Aunque muchos lo consideran el mejor jugador de heads-up en No-Limit Hold’em, Messere es cauto. Reconoce que todavía debe probarse más contra rivales como Linus , Davy Jones o Berri Sweet . “Estoy jugando contra todos. Quiero demostrarlo, pero sobre todo quiero demostrármelo a mí mismo”.