Doloroso bad beat por más de US$600K en High Stakes Poker
El tercer episodio del año dejó varios heridos luego de que se diera el pozo más grande en lo que va de 2025.
Miércoles again. No estoy ebrio esta vez, pero la felicidad es indescriptible, y no sólo se debe al reciente logro de la dupla Salas/Peluca que tantas alegrías le va a dar a este país. Tenía algo ligeramente preparado para hablarles hoy, poniéndome quizás un poco técnico y contarles de la persona que cambio mi forma de ver el Poker y me saco del pozo ciego del snap-fold preflop, snap-bet flop, snap-apostar 3/4, siempre. El jugador, ya se los habré citado alguna vez, es (redoblantes varios) Tom «Durrrr» Dwan. El amor no a primera vista ocurrió en High Stakes 5, el mejor Show alguna vez televisado. En él los jugadores se sentaban a raisear por información, foldear c/bets, perder coolers millonarios o intentar agarrar a Sammy Farha, que de a ratos se ponía más suculento que los dos empresarios que invitaban por mesa. Revisando un par de manos que tenía en mente destacar, me di cuenta que mi fascinación es casi irreproducible, y les admito que en un primer momento (me salió el hellmuth de adentro, por aquel entonces mi ídolo) y dije «es cuestión de tiempo que este muchacho quede busto, o al menos algún profesional de la mesa lo atrape (mi jugada predilecta por aquel entonces).» No fue ni será así, y me costó toda la temporada darme cuenta que estaba ante un verdadero genio, al que no recuerdo haber visto una sola sesión de cash en vivo en la que salga en números rojos, y créanme que el prontuario es grande.
High Stakes Temporada 1
Hacia atrás en la historia entonces, corría el año 2006. Negreanu era el ídolo máximo de todos e incluso de él mismo (checkeen el video y saquen conclusiones) con sus reads -aunque toscos- adelantados a la época. Los invito a ver una mano que juega Daniel, quien -siguiendo un poco con la fiebre de celebrity- se sentó en la mesa con un millón cuando el resto poseía USD $100.000, el límite más grande que podía encontrarse. La mano en cuestión a partir del minuto 4:55.
Volviendo a la mano en cuestión, Buzz, un viejo lobo de mar y no sólo por su bigote, sólo flatea dieces y vuelve a callear, fascinado con la idea de meter un set. A diferencia de la tendencia que explotaría años posteriores (con el aumento de la locura pre flop) de 3 betear por valor dieces, aquí no parece una decisión difícil para el grinder añejo, un concepto que considero importante reevaluar en el poker de hoy en día si aún no lo han hecho. Ok, entonces el flop es: 7 6 4 y la acción le llega a Negreanu, quien opta por poner all in a ambos jugadores. No sé por donde empezar: Nunca un overshove como ese es pagado por manos peores, ni siquiera en 2006; Pierde valor contra exactamente las dos manos que tiene sus oponentes, stackea 100 ciegas cada vez que le metan set (implícitas vengan a mí); ni siquiera era capaz de balancear haciéndolo digamos con A 5, pues volvamos a la parte del 90% que ya decidí estirar al 95%, con la misma seguridad con la que digo que un 75% de las veces la mano con la que me fui del CAP de Rosario el villano tiene que foldear mi apuesta en turn. Rojos son los $17500. Lindo Rosario igual, me olvidé como se juega al Paddle, eramos tan deportistas. Hermosa la pile. Estoy más bronceado que Sergio Denis, pelé panza.
HSP Temporada 2
En el flop y a diferencia de lo que parecería tendencia, Gus Hansen -jugador que en su medida revolucionó el circuito- hace un súper valorable ch/raise en un board seco que pondría a pensar a todo buen jugador de hoy en día, sobre todo teniendo en cuenta su nivel de agresividad y exposición mediática que tenía por aquel entonces, siendo catalogado como maníaco definitivamente (además claro está del más que polarizado rango de raise en este spot, pues estaba constituido por aire o nuts, con el agregado de showdown mediano subiendo por información, que automáticamente checkeaba turn al dudar uno mismo de la fortaleza de la mano). También inesperdamente, Negreanu decide sólo pagar, en parte -siempre yo Lucas Giayetto, 8 am, creo, intuyo- porque el slowplay era lo indicado contra un jugador de esta reputación, pero quizás también con indicios de la idea de que un raise allí terminaría por convencer a un par simple que haya check/raiseado por valor (increíblemente era el paradigma de la época, incluso para los jugadores de primera talla como los presentes). Por otra parte, el call en flop y/o turn no representaba necesariamente un call al river, pues con la agresividad y tamaños de apuesta adecuados podía convencerse al adversario en el transcurso de la mano que poseíamos indefectiblemente la mejor mano.
HSP Temporada 3 y 4
Antonius, Towsend y Phil Galfond entran en escena, marcando tendencias y diferenciándose de los demás por su razonamiento lógico y deductivo, la no inclusión de pre-conceptos sin cuestionarlos. Jamie Gold y Farha agregan un poco de agresividad irracional creando dinámicas entretenidas, es recomendable de tener tiempo mirar la cuarta temporada completa antes de embarcarse en la quinta, cuando el mesías -Durrrr, no nos olvidemos- hace su aparición. Aquí un breve link a un resumen de la acción:
Hecha la introducción, los invito a ver una última mano a partir del minuto 34:26 donde Sammy Farha se bate a duelo con Mike Baxter, en una seguidilla de subidas por información que ni ellos mismos pueden definir si realizan por valor o están bluffeando. La primera de Baxter es ejemplificadora, siendo calleado sólo por mejores o más bien lidiando con una apuesta inesperada de un jugador imprevisible que pone en tela de juicio la sinceridad y la calidad de la información: no siempre que se subía para aprender se obtenía la verdad.
Llegó el momento y sé que fue largo y extensivo, pero sinceramente espero robarle una sonrisa a aquéllos enamorados de HSP desde el primer momento como yo. Espero recuerden momentos irrepetibles con los que crecimos junto con el juego en sí, siendo a menudo este show nuestro único reflejo y fuente de consulta, para de una vez por todas emular a aquéllos que vivían el sueño americano que nuestros padres no nos habían contado, y nosotros, vagos y jóvenes, soñábamos para nosotros. La otra mitad del paciente público sospecho estará constituido por aficionados al Poker que se perdieron estas épocas doradas de desinformación, que probablemente miren una y otra vez asombrados que tan mal podían jugar los mejores del mundo comparándolos aún con ellos mismos, dos, tres, cinco años después.
Moraleja time: repítanla en voz alta en sus casas, última opción, última pista.
El cantante de turno y el rubio afrancesado tienen razón. Después desvarían con que no hay «Gettin over/no se olvida» y es otra gran verdad que ojalá algún día podamos filosofar, pero la pregunta del millón es:
¿Qué hacíamos en 2004 que no jugábamos a este jueguito? ¿Taaaan fácil podía ser?.
Ésta duda tiene que haber cruzado su mente en el desarrollo de los videos, del texto. De no hacerlo, les fallé y también ustedes a mí como lectores. Se hace inevitable imaginar que hubiese sido de nosotros de incursionar en el Hold Em en los años cercanos al boom de Moneymaker. Probablemente no estaríamos en nuestras casas preguntándonos como Phil Laak puede ser profesional de High Stakes pues seríamos inclusive más ricos que él. Quizás, incluso Jennifer Tilly seguiría estando buena y nosotros seríamos su feliz pareja.
En reflexiones menos fatalistas, de vaso medio lleno como buen Miércoles, es mandatorio admitir que todo lo que sabemos del Poker -toneladas en comparación- rara vez proviene de nosotros mismos, sino de la interacción entre jugadores -ya sea paga entre desconocidos o de beneficio mutuo y/o amistad propiamente dicha- que tuvieron la capacidad de darse cuenta cuales eran los errores más comunes y que puntos debían ser revisados, diferenciándose de los jugadores robóticos y pasivos, los simples aprendices, eternos asentidores de cabeza. No es difícil encasillar entonces y finalmente a Tom «Durrrr» Dwan en uno de los dos grupos. El argumento será puesto a prueba el próximo Jueves, con la escasa objetividad que mi máximo ídolo pokerísitico merece. See when I see you people.