Siempre que se habla con Johann Busche , el profesional barranquillero que ha sabido integrarse a la armada paisa desde sus inicios en el poker, la tonalidad de su acento inunda el ambiente de alegría. Curramba, como es conocido entre amigos y compañeros de mesa, en honor a su ciudad de procedencia, es en sí mismo un carnaval, un hombre que sabe celebrar la vida en todo momento. Por estos días, esa festividad que lo caracteriza, está más reluciente que nunca en el rostro de Johann. El brillo de su sonrisa es el mismo que el del trofeo que recibió por su tercer lugar en el evento 6-Max NLH de las Brazilian Series of Poker (BSOP) Millions, en el que la fortuna le dio el gusto de compartir el 3-handed con su compañero de estudio y gran amigo de las mesas, Daniel Hurtado .

Aunque al final, después de un deal en el heads up, el título de campeón tomó rumbo a Argentina, en manos de Adrián Vargas , la proeza de que dos colombianos terminaran en el podio de un exigente evento internacional en el que tomaron parte 344 competidores de la élite latinoamericana, es algo que se antoja comparable con las grandes gestas de los escarabajos en las carreteras europeas. Al mejor estilo de Nairo y Urán, Hurtado y Busche se ayudaron a escalar, aunque la camiseta amarilla se les escapara en el embalaje. De cualquier manera, pedalearon como los mejores. Y de eso sí que sabe Curramba, que alterna las runneadas en los paños con sesiones ciclísticas a las que acude para hacerle honor al proverbial “mente sana, en cuerpo sano”.

Estuvimos hablando extensamente con los héroes de Sao Paulo , y decidimos presentar inicialmente la entrevista concedida por Johann Busche, por estar viviendo una especie de bautismo de fuego en los paños internacionales, donde hasta ahora no había alcanzado un registro siquiera cercano al que obtuvo en esta cita que cerró la temporada 2015 en las BSOP Millions. Con su desparpajada amabilidad, el Curra nos abrió el diario de su viaje por tierras paulistas…

CodigoPoker: Saludos, Johann. Empecemos por realizar un corto balance de tu participación en estas BSOP. ¿En qué eventos participaste y cuáles fueron los resultados obtenidos?

Johann Busche: Saludos para CodigoPoker y sus lectores. El balance es muy positivo. Llego muy contento. De cada evento me quedaron muy buenas sensaciones. El primero fue el NLH de 750 mil reales garantizados. Avancé al Día 2 y logré estar en cobros, en la posición 280 de un field durísimo, de 3.800 jugadores.
Eso me dio motivación y me impulsó para entrar inmediatamente al Día 1A del Evento Principal, con la mente despejada, pensando solo en disfrutar el momento y divertirme. De entrada pude subir mi stack de 30.000 a 48.000 puntos y me mantuve alto durante toda la jornada. En la última mano, con 75.000 en mi pila, un jugador shovea 27.000 en UTG, con el blind en 1.000. Yo levanto par de damas y acepto. El rival enseña K-7 y recibe el rey en el flop. Aunque fue frustrante perder un pozo tan importante, quedé tranquilo por haber clasificado en el primer intento, tal como lo había planeado.
Pude tomarme dos días de descanso, en los que tuve tiempo para disfrutar de un partido del Sao Paulo en el Morumbí y cuando pensábamos dar una vuelta por la ciudad para aprovechar el domingo, cayó un diluvio que no nos dejó mover del apartamento. Cada uno sacó su portátil y fue sesión online del Team Bate, con Julián Pineda , Sebastián Toro , Daniel Hurtado , Julián Velásquez y Héctor Pérez . La lluvia fue una buena señal, porque conseguí llegar al heads up en un torneo $2.20 [3x-Turbo] de Omaha Hi/Low en PokerStars, con un premio de 500 dólares que cayeron muy bien para esos días de viaje.
Salí del Evento Principal en el Día 2, en una mano en la que tengo 30 blinds en mi stack y me corresponde el botón. El Hi-Jack, con 25 blinds, abre con min-raise. Yo veo pareja de nueves y tribeteo a 5 ciegas. El rival cubre y luego pasa con un flop que trae J-5-3, con dos corazones. Yo decido dar check, para evitar un check raise del oponente. Al turn cae el 9 y el rival juega check – raise all in, ante una apuesta mía de 7 blinds. Cubro y él enseña -Qh- -Th-. El river no me dio ayuda y las pocas fichas que me quedaron se fueron en una mano en la que entro dominado con AJ vs AK.
Me inscribí en eventos laterales de Omaha y Courchevel y jugué también un NLH Turbo de 600 reales. En todos jugué manos por pozos enormes, que me habrían dejado cómodo en cualquiera de las tres competencias, pero la varianza no estuvo de mi lado a la hora de definir los spots. La última oportunidad que teníamos para un gran premio estaba en el 6-Max, porque Julián Velásquez, Pineda y Daniel Hurtado, que eran los que más habían avanzado en el Evento Principal, llegando a los cobros, no lograron pasar al Día 3.

CP: Pasemos a hablar de esa historia del 6-Max, que es la que todos queremos oír. ¿Cómo viviste este primer deep-run en eventos internacionales? Qué situaciones claves marcaron tu camino al podio?

JB: Fue un torneo al que le pusimos toda la motivación, con todos los compañeros de viaje activos en el field. La última bala para el sueño y todo se dio muy bien desde el principio. Todos nos hicimos a stacks muy fuertes desde los primeros niveles. Seguimos creciendo y solo perdimos a Julián Velásquez a la hora de cerrar el Día 1. Con Julián Pineda, Sebastián Toro y Daniel Hurtado, llegamos a los cobros y el único que se veía un poco corto, era Pineda; los demás teníamos stacks superiores a 45 blinds, con el promedio en 30 ciegas. Ver que íbamos avanzando todos, nos dio mucha fuerza para este deep-run.
Sebastián (Toro) salió en el puesto 17 y, cuando el field se redujo a dos mesas, alcancé el millón en fichas, un stack que me permitía tener casi seguro mi asiento en la mesa final, cuando el blind estaba en 8.000. Me correspondió la misma mesa con Daniel (Hurtado) que era el único oponente que me igualaba en fichas. El resto estaban todos por debajo de 350.000 puntos, lo que nos permitió estar cómodos, sabiendo que solo jugaríamos sólidos y usando la presión de las ciegas a nuestro favor, para garantizar la mesa final.
En la instancia definitiva, fue el momento de que cada uno lo diera todo para ir por el premio mayor. Nos aseguramos el podio, manteniendo el mismo nivel que tuvimos todo el torneo. En el 3-handed, termino all in en un flip contra el propio Hurtado y salgo de tercero, orgulloso no solo de mi juego, sino del buen nivel y de todo lo demostrado por los compañeros de viaje. En este torneo, de 5 inscritos, 4 alcanzamos los cobros, 3 estuvimos en el top 20 y 2 llegamos al podio. Creo que es la primera vez que Colombia tiene a dos representantes en la premiación de un torneo de esta importancia, y además en un 6-Max que es la modalidad que más exige habilidad en el Hold’em, porque hay que estar siempre activo y buscando pozos para poder avanzar.

CP: ¿Qué planes proyectas para el futuro cercano después de esta magnífica actuación en Brasil?

JB: La base es mantenerme juicioso con el juego online; aprendiendo todos los días y aprovechando el debate con los compañeros, estudiando y revisando manos para llegar mejor preparados a cada evento que se presente. Como próximo reto internacional, le apuntaré en enero a viajar a Bahamas para el PokerStars Caribbean Adventure (PCA), donde queremos buscar la hazaña de jugar y avanzar en el Evento Principal.
Además, revisando los eventos paralelos, encontré un torneo de Omaha Hi/Low, que es una modalidad en la que siempre me siento cómodo jugando, la he estudiado y he conseguido buenos resultados. Es un torneo que incluso tiene un costo un poco menor a otros eventos que jugaremos allá, así que estoy muy motivado por tener al fin la oportunidad de jugar un buen torneo de esta especialidad en vivo.

CP: ¿A quién quieres dejarle tus agradecimientos o enviarle algún mensaje al regresar de Sao Paulo?

JB: En primer lugar, infinitas gracias a mi mamá, que es mi motor en todo lo que hago. Sin ella, este viaje no hubiera sido posible, pues estuvo para mí con toda disposición en un momento en el que dependió de ella que pudiera ir a Brasil. Como siempre, me apoyó sin dudar, de la misma manera que lo ha hecho desde que decidí este estilo de vida. A ella le dedico este trofeo que, en últimas, es más de ella que mío.
También siento mucha gratitud con todos mis amigos y mi familia, que estuvieron muy atentos durante las instancias finales del 6-Max. Especialmente, le agradezco a Héctor Pérez, a Julián Pineda, a Julián Velásquez, a Daniel Hurtado, a Sebastián Medina, que aunque no haya podido viajar con nosotros, hizo sentir su energía en todo momento, y, en renglón aparte, a Sebastián Toro, que fue un gran compañero en esta aventura. Todos ellos fueron la compañía ideal durante toda la travesía de estas BSOP, y la armonía que se maneja entre nosotros siempre es única, además del apoyo de unos con otros, para todo. Con un impulso como el que ellos me dan, es natural que avance.