«Son parte del juego y todo jugador de poker los experimenta». De esa manera, Robertino Greco explica la causa principal por la que tal vez, muchos se hayan planteado qué se estaba haciendo mal: ¿Esto es para mí? ¿Por qué siempre sale ese as al river? ¿¡Qué hago jugando a este juego!? Éstas son típicas preguntas que algún grinder se hizo alguna vez, mientras atravesaba un downswing.

«Influye mucho la motivación que uno tiene», dice el crack online. «Depende de cómo estés de ánimo. Eso va a marcar la manera en la que lo puedas atravesar. Aunque uno siempre tiene que estar focalizado y buscando el modo de hacer siempre lo mejor».

Pero resulta que estas malas rachas no son moco de pavo. Tampoco se puede diagnosticar una razón, y así lo ve MaestroShao: «El estado de ánimo de un jugador influye en los downswing que uno pueda tener. Hay muchos factores que hacen que caigas en un mal momento. A veces hay diferentes variables que terminan en situaciones desfavorables», explica quien ha ganado un evento de la SCOOP en 2012.

¿Ésta es una cara de downswing? ¡Arriba, Greco!

Aunque si bien el EV puede perjudicar a determinado jugador, el eje del asunto no siempre pasa por el hecho de que se concreten los 2-outers en contra, que el otro siempre meta el 30% ó el 20%, o que nos fulmine el proyecto runner-runner: «Uno tiene que entender en qué límites puede andar y en cuáles no. Hay veces en las que los downswing no son por otra cosa que porque estás jugando mal. Hay muchos jugadores que participan en torneos que no deberían. La medida en la que alguien crashee el límite, es directamente proporcional al downswing que pueda tener. Uno siempre tiene que prestar mucha atención cuando arriesga su dinero al momento que está en mala racha», marca la cancha.

Y es aquí donde el jugador que se coronó tanto en Madero como en Rosario se detiene: «Sin gestión de bankroll no hay nada«, sentencia. «Tener una buena gestión de banca es el secreto para poder jugar al poker». Y como si fuera una máxima, Greco recita: «Hay que respetar como nunca la banca que se tiene en los downswings. Cuánto la puedo estirar, qué debo jugar teniendo distintos planteos y planes de salvatajes. En mi caso particular, siempre intento que las cosas no me agarren de improvisto, porque si no se vuelve una timba, jugar para ver quién ojetea más«.

Finalmente, Robertino, que hace poco publicó su progreso en línea, se refirió al plan de juego, una herramienta fundamental para que las malas rachas sean efímeras y llevaderas: «Uno siempre tiene que estar ojeando cómo le va en el límite. Creo que planificar es la base para cualquier disciplina. A veces me pasaba que estaba jugando una sesión y tomaba una decisión, y después me daba cuenta de que eso no me gustaba. Entonces comencé a plantear mi juego en cómo poder mejorar lo que voy haciendo durante la sesión, post sesión, y cómo voy a jugar esa partida. Para mí son cosas que valen la pena. Ya que con el poker en particular no alcanza con tener un plan para jugar, sino también administración».