Existe una idea generalizada que suele repetirse entre la comunidad de jugadores y es que «muchas enseñanzas del poker pueden replicarse en la vida real o viceversa«. Lo curioso es que a pesar de esta afirmación, son pocos los saben aprovechar herramientas del día a día para mejorar en las mesas.

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El profesional Benjamin bencb Rolle ha escrito su última columna del año, la que se puede catalogar como un regalo navideño para comenzar con pie derecho el 2024, donde expresa algunos de los pensamientos y prácticas que constantemente recomienda a sus alumnos.

Las emociones y el poker, dos amigos inseparables.

Lo primero que afirma el alemán es que «perderás más a menudo que ganarás. Y la mayoría de ustedes no pueden manejar eso y este es justo el origen del tilt». También asegura que es hacia donde se dirige la sociedad: distracción constante, subidones de dopamina, no ser capaces de sentarse y lidiar con los pensamientos más oscuros.

«El poker a menudo amplifica lo que nos pasa en la vida real. La ira, tristeza y la agresión se multiplicarán en las mesas. Por eso es importante jugar sólo cuando te encuentres en una situación emocionalmente estable. Por ejemplo, meditar antes de tu sesión puede ser tan poderoso. Le das a tu dolor, y a los pensamientos negativos su atención. Esto te da el poder. El poder de mantenerte a cargo de tus emociones. De permanecer presente a pesar de sentirte mal o triste».

Por otra parte, asegura que los grandes profesionales pueden jugar a pesar de algunas dificultades. Jugar bien a pesar de sentir algún tipo de enfado o decepción es increíblemente poderoso. No se pueden negar ni reprimir las emociones humanas. La clave está en seguir jugando el llamado A Game a pesar de dichas emociones.

«Algunos de ustedes se presentan a las sesiones con casi cero preparación mental y se preguntan por qué siguen en tilt. No trabajan en su mentalidad, descubriendo de dónde provienen sus problemas de tilt. Simplemente no te preocupas lo suficiente por convertirte en la persona que quieres llegar a ser», concluyó el profesor de Raise Your Edge.