La primera reacción que tuvo el carismático jugador de poker Erik Seidel al ver el guión de Rounders, la película que más tarde se convertiría en la más importante del poker a nivel global, tiene una peculiar historia detrás.
Es que su participación proviene de la época en la que jugó el mano a mano del Main Event de la WSOP 1988 que perdió tras caer en la trampa de un experimentando Johnny Chan . «Cuando vi el guion pensé ‘esto es horrible'», señalo Seidel en una entrevista en el podcast de Brian Koppelman, uno de los guionistas de la película y amigo del jugador.
«Estaba emocionado de participar en un proyecto con John Dahl, el director, a quien respeto mucho», dijo Seidel. «Creo que firmé el contrato antes de ver el guion, no estoy seguro. Pero luego reconocí que, en general, sería positivo y no tardé en aceptarlo».
VIDEO | Chan vs. Seidel en Rounders
Dicha escena sirvió de transición para mostrar a un Mike McDermott, el personaje protagonista interpretado por Matt Damon , quien se dio cuenta de la jugada que traía entre manos el Expreso Oriental. Chan con las nuts simplemente pasó y dejó que Seidel apostara todo con su par superior, una jugada que inspiró la mano final contra Teddy KGB.
«En primer lugar, fue justo en el sentido de que no jugué bien la mano», explicó Seidel en el podcast. «Estaba un poco abrumado por el momento. En segundo lugar, tienes una licencia poética para la trama, pero no tanto para mí, porque no me emociona la manera en la que jugué».
En la entrevista, el estadounidense reveló que incluso discutió un deal con Chan, pero las cifras que le ofreció no fueron aceptadas. «Quería hacer un trato justo y, si no recuerdo mal, pidió algo más que sentí que era injusto para mí», explicó. «Pensando en ello ahora tal vez lo fue, pensando que él tenía mucha experiencia y yo prácticamente ninguna. Básicamente fue el primer torneo que jugué».
Para finalizar, Koppelman le preguntó a Seidel si la película había afectado a su imagen pública. «Creo que me hizo más conocido, pero no creo que haya cambiado mi reputación de ninguna manera. Esa película fue tremenda para el poker. Mucha gente dice que fue lo que inició su interés por el poker, así que fue algo positivo, ciertamente no me impactó negativamente».
Desde aquella participación de 1988, la carrera de Seidel fue al alza y después de tres décadas en las mesas, el estadounidense cuenta con la fama merecidamente ganada al igual que los 37 millones de dólares que, según HendonMob, ha logrado conseguir en torneos en vivo, además de ocho brazaletes de la WSOP.