TRITON POKER SERIES
Artur Martirosian ganó un heads-up ruso y levantó su primer trofeo de las Triton
El ruso viene teniendo una gran serie pero no había podido ganar un título hasta ahora.
El poker es un juego cruel y cambiante. Quien un día gana el mayor torneo de su vida puede luego experimentar el downswing más fuerte de su carrera y quebrarse psicológicamente. Probablemente una de las partes más importantes del juego es poder sobrellevar las etapas de pérdidas. Es importante aceptar que la varianza forma parte del juego y que perder es inevitable. El pro y coach estadounidense Patrick Garritsen tiene una historia de vida interesante relacionada con esto.
En sus épocas de estudiante universitario, Patrick comenzó a experimentar problemas de salud relacionados con su incapacidad para aceptar las frustraciones. Había reprobado su pasantía final y tenía que repetir el curso para graduarse. El estrés tomó control de su vida. Unas semanas más tarde, experimentó el primer ataque de pánico mientras volvía a su casa.
Ese ataque fue el primero de muchos. Durante un tiempo largo, Patrick tuvo que lidiar con ataques de pánico repentinos que aparecían en momentos al azar. «Probé de todo para luchar contra la constante preocupación de que aparezca otro ataque de pánico, pero nada funcionaba» cuenta Gerritsen. Un buen día, mientras regresaba a su casa, sintió que estaba a punto de tener uno. En lugar de desesperarse, simplemente pensó «Tranquilo, es solo otro ataque de pánico, respira y pronto pasará». Ese simple pensamiento hizo que el pánico desaparezca. Gerritsen cuenta que nunca volvió a tener un ataque de pánico.
Esta es una historia que él suele usar en las charlas con los jugadores que entrena cuando están atravesando un downswing que los hace dudar de su capacidad como jugadores. Es importante entender que hay cosas que no están bajo nuestro control y la mejor manera de superarlas es aceptándolo. La mala experiencia de Patrick lo ayudó a encontrar la terapia y la meditación. Estas, a su vez, lo ayudaron a mejorar como persona y profesional.
En el mismo orden, el mismo Garritsen cuenta que en el peor downsing de su carrera pasó de jugar NL2000 a NL200. Si bien en un principio sentía que había perdido su habilidad de ganar, con el tiempo esa crisis terminó ayudándolo a crecer y mejorar más que nunca. «Hay oportunidad en luchar contra la adversidad» nos revela Gerritsen. Simplemente hay que aceptar lo que no podemos controlar y hacer lo mejor que podamos con lo que sí.