El 2022 fue un año con varios matices dentro del poker. Aunque se vivieron momentos únicos, también hubo episodios no tan agradables que hacen que sea difícil encontrar un adjetivo para estos últimos 12 meses aunque podría definirse como polémico.
Con el regreso de la acción en vivo fueron varias las postales que se pudieron observar. Los jugadores se rencontraron en las mesas y mientras algunos de los nombres más destacados fueron acusados, otros consiguieron grandes hazañas, todo en medio de eventos históricos que rompieron récords de asistencia.
Jugadores vetados de los grandes compromisos
Las redes sociales fueron la vitrina perfecta para generar importantes acusaciones sobre maniobras ilegales en el poker online. Jugadores como Bryn Kenney , Ali Imsirovic y Jake Schindler fueron los más señalados de buscar obtener ganancias al margen de lo que es considerable como ético.
A la par de ello, nació el Consejo de Integridad del Poker al que se afiliaron varias salas y festivales con el fin de erradicar a los tramposos de este juego, con Imsirovic y Schindler como los primeros castigados al no permitírseles jugar durante toda la serie del PGT 2022.
Jake Schindler, uno de los odiados del año.
Grandes torneos y grandes campeones
El lado positivo del 2022 fue la cantidad de eventos que lograron establecer números históricos, con el WPT World Championship de diciembre a la cabeza al alcanzar más de 29 millones en su prizepool pero lo más llamativo fue ver cómo los grandes profesionales hicieron valer su buen juego a lo largo del año.
Uno de los más destacados fue la participación de Dan Cates en el Poker Players Championship que se jugó durante la WSOP. Al mejor estilo de «Macho Man», consiguió la hazaña de pocos: hacer el back to back que lo dejó con un nuevo brazalete junto al peleado premio de US$1.449.103.
Por su parte, Daniel Negrenu logró acabar con una importante sequía en su carrera al llevarse el Super High Roller Bowl VII con US$3.312.000 mientras que el argentino Alejandro Papo MC Lococo logró ser el rey de los EPT al conseguir varias picas plateadas a lo largo del año.
Papo y dos de sus trofeos del EPT.
La mano infame
Sin duda, la cereza del pastel de la llevó el episodio ocurrido en el Hustler Casino Live entre Garrett Adelstein y Robbi Jade Lew donde a esta última se le acusó de hacer trampa con un J4o. Dicha polémica se convirtió en una escándalo que transcendió los límites del poker y fue reseñada en varios medios.
Después de hasta llegar a ser motivo de disfraz de Halloween e implicar una extensa investigación que incluyó detector de mentira, se determinó la inocencia de la jugadora que ahora se prepara para volver a las partidas de cash del mencionado casino.
Adelstein, Robbi y la gloriosa Jota high.