BRAZILIAN SERIES OF POKER
BSOP: Andrade ganó el Mystery Bounty con el chileno Mauras, 3°
Luego de dos días de juego, el profesional brasileño se quedó con el segundo torneo Mystery del BSOP, con podio de la Armada.
Hace unos días la leyenda viva del poker mundial, Daniel Negreanu dio una entrevista a un podcast llamado No Laying Up que trata temas de golf y cómo no, entre la conversación salió una millonaria prop bet que hizo el canadiense usando de excusa este deporte contra otro crack del poker, Phil Ivey .
Kidpoker contó que aprendió a jugar poker a los 30 años y se sintió tan a gusto con él que puso en juego 550 mil dólares para demostrar su talento con los palos.
La apuesta fue que podía hacer 80 golpes desde los tees traseros del TPC Summerlin de Las Vegas, un campo del PGA Tour que cada año se usa para el Shriners Hospitals For Children Open.
El plazo de entrenamiento fue de un año para mejorar su juego y lograrlo, sin embargo, se tardó menos que eso para cumplirlo.
«Mi golf no era muy bueno, la verdad. Los tees traseros del TPC Summerlin dejan el campo en unas 7.000 yardas de longitud. Teniendo en cuenta que con mi drive no puedo ir más allá de 230, no consigo alcanzar ninguno de los greenes desde allí. Pero aposté que si me daban un año, podría hacer una ronda de 80 golpes», narró Negreanu.
«Sí, lo reconozco, estaba borracho. Estábamos bebiendo y aposté un pastón. Pero por suerte no tenía límite de rondas, sólo de tiempo. Cuando faltaba un mes para que se cumpliese el plazo salí a jugar mis tres primeras rondas: 110, 108 y 106, respectivamente… Así que a partir de ahí, me levanté todos los días a las siete de la mañana para entrenar una hora, jugar los 18 hoyos, entrenar otra hora, jugar otra vez los 18 hoyos, jugar nuevo nueve más y para terminar, entrenar otra vez. Todos los días de siete de la mañana a ocho de la tarde», contó.
«En una semana, aproximadamente, estaba firmando rondas de 90 bajo. Y una semana después, de 80 altos. Me quedaba más o menos una semana y media y en los nueve primeros hoyos iba dos bajo. Así que todos los carritos de los jugadores que estaban en el campo empezaron a apartarse en plan «oh cielos, aquí viene otra vez». Había como 60 carritos de golf en los últimos tres hoyos, mirándome. Y necesitaba hacer tres bogeys para ganar la apuesta», explica.
«Eran los tres hoyos más difíciles. El primero era el más sencillo, o eso creía… Y por supuesto, hice doble bogey. Así que necesitaba hacer al menos un par en uno de los dos últimos. Llegué al último green con una opción de par de unos dos metros para conseguirlo. Yo no soy buen pateador, la verdad, pero cuando golpeé la bola, caí rendido de rodillas y vi cómo la bola entraba en el hoyo. Lo había logrado», recuerda Negreanu.
Negreanu prosiguió contando más anécdotas en el golf, entre ellas otra apuesta. Según contó, llegó a perder 1.2 millones de dólares en un sólo día contra Phil Ivey.
«Solíamos jugar mucho al golf. Una vez en Shadow Creek fue un desastre. Perdí más de un millón en una sola ronda». Llegó a perder unos tres millones, pero al final, según cuenta alegremente, recuperó todo con la ayuda de un caddie y de su entrenador, Christian Sánchez.
Fuente: ten-golf.com