¿Habrá primer campeón latino de la WSOP 2025? Roberts lidera el Evento #3
El venezolano es favorito este sábado para ganar el brazalete en el 8-Handed NLH de 5.000 dólares cuando quedan solo cinco aspirantes al título.
Desde que la Inteligencia Artificial comenzó a superar a los humanos en juegos como el ajedrez y el Go, era cuestión de tiempo hasta que se metiera en las mesas de poker. Pero el desafío no era menor: el poker es un juego de información incompleta, donde el farol, la psicología y la lectura del rival juegan un rol clave.
Sin embargo, en los últimos años, la IA especializada en poker avanzó a pasos agigantados, al punto de que ya existen bots capaces de vencer consistentemente a jugadores profesionales. Uno de los casos más conocidos fue Pluribus, desarrollado por Facebook AI y la Universidad Carnegie Mellon en 2019, que logró derrotar a múltiples pros en partidas de No Limit Hold’em 6-max.
A diferencia de otros bots que funcionan en partidas de uno contra uno, Pluribus fue diseñada para enfrentar a cinco oponentes humanos en mesas 6-max, una modalidad mucho más compleja, porque implica múltiples variables, decisiones simultáneas y, sobre todo, información incompleta. Justamente ahí reside el gran mérito de esta IA: en el poker, las cartas ocultas y el factor humano dificultan enormemente la toma de decisiones óptimas. Y aun así, la IA ganó con autoridad.
Durante las pruebas, Pluribus jugó más de 10.000 manos contra profesionales reconocidos como Darren Elias y Chris Ferguson, consiguiendo ganancias sólidas por cada 100 manos jugadas, una métrica clave en el poker online.
Aunque Pluribus no está disponible para uso público, su desarrollo dejó enseñanzas muy valiosas para grinders y entusiastas del juego, según el post que realizó Meta en su blog oficial.
En principio, el estudio arrojó que Pluribus tiene la capacidad de aportar un juego impredecible y balanceado. Por ejemplo, evitó caer en patrones repetitivos. Mezcló faroles con manos fuertes, varió sus tamaños de apuesta y se adaptó a cada situación con lógica implacable. Esto refuerza la importancia de no automatizar el juego y de mantener un enfoque flexible.
Por otro lado, Pluribus demostró que es posible acercarse a una estrategia óptima incluso en escenarios complejos como los de una mesa de seis jugadores. Su estilo fue muy difícil de explotar, lo que la convirtió en un modelo ideal para quienes buscan afinar su juego.
Lo sorprendente de todo esto fue que el bot de Meta obtuvo estos rendimientos empleando pocos recursos técnicos: funcionó con una sola GPU y apenas 128 GB de RAM, dos características que resultan familiares para celulares de gama de entrada, es decir, los más comunes y económicos.
Esto no hace más que anticipar lo que ya estamos viendo hoy: herramientas basadas en IA al alcance de cualquier jugador online, como PioSolver, GTO Wizard y otras plataformas de entrenamiento que replican líneas similares a las de la máquina.
La aparición de Pluribus lejos está de confirmar que los humanos no tendrán lugar en el poker. Todo lo contrario: este avance tecnológico demuestra que el estudio, el análisis de datos y el uso de nuevas herramientas son clave para mantenerse competitivo. Y, por sobre todo, que el poker sigue siendo un juego de estrategia, inteligencia y adaptación.
Para quienes juegan online todos los días, conocer estas tecnologías no es solo una curiosidad geek: es parte del futuro del poker.