FÓRMULA 1
Fórmula 1 en Las Vegas: Leclerc y Sainz jugaron al poker antes de la carrera
Los pilotos de Ferrari se sentaron en una partida con Antonio Esfandiari y Michael Phelps.
Otros eran los tiempos cuando el nombre de Phil Ivey se asociaba con grandes resultados en el poker, mientras esperamos que esos buenos momentos vuelvan, tenemos que contarles las desventuras que ha tenido este jugador fuera de las mesas. Hace pocos días vimos el cierre temporal de su sitio de entrenamiento Iveypoker.com y su nuevo emprendimiento en el mundo de la medicina natural con marihuana, sin embargo, antes de eso sufrió uno de los bab-beats más grandes de su vida al ser acusado de tramposo por una corte inglesa en el caso contra el casino Genting Crockfords.
La disputa fue generada debido a que dicha casa de apuestas se negó a pagarle 12.000.000 de dólares al estadounidense, los cuales había ganado jugando Punto y Banca, gracias al uso indebido de una técnica llamada “edge sorting”, la cual podemos definir como una forma de reconocer las cartas por la detección de fallas o características del reverso de ellas. La conclusión del caso es que la justicia encontró las pruebas necesarias para señalar a Ivey como culpable, sin embargo, el ganador de diez brazaletes de la WSOP no se quedó con las manos cruzadas y decidió apelar.
Así lo señaló Mathew Dowd, uno de los abogados de Ivey: “Les puedo confirmar que la semana pasada mi cliente presentó los documentos ante el Tribunal de Apelaciones. Ivey está apelando que la decisión del juez está en lo incorrecto y que el “edge sorting” no es trampa.”
Como vemos, Phil está disparando una nueva bala en este bullado caso y de seguro, pronto tendremos nuevas noticias al respecto.
¿Tú crees que el “Edge Sorting” es hacer trampa?