Hace algunos días atrás les presentamos el caso judicial que tenía en medio de una gran disputa económica a Phil Ivey y al casino inglés Genting Crockfords debido a que esta casa de apuestas se negó a pagarle 12 millones de dólares al estadounidense los cuales había ganado jugando Punto y Banca aduciendo que el susodicho había hecho trampa. Ivey, indignado, los demandó.

En un principio conocimos sólo la versión de Ivey de los hechos, en donde en resumidas cuentas dijo que él no había hecho ninguna cosa ilegal para ganar, ahora el casino lanzó un comunicado de prensa en donde continua con su postura de que Phil si hizo trampa y él, junto a una amiga asiática, se aprovecharon de un defecto en las cartas y a través de ello podían ver las cartas que vendrían y de esta forma sólo apostar en los momentos adecuados.

Según la casa de apuestas Ivey y su supuesta cómplice lograban marcar las cartas 8 y 9, las más valiosas en el Punto y Banca, antes de devolverlas al repartidor.

Una fuente del diario inglés afirmó que el Casino Crockfords usaba un naipe que era muy fácil de marcar debido al diseño de las cartas y que esto fue fácilmente reconocible para Ivey quien lo aprovechó para lograr millonarios beneficios junto con su compañera de la cual este mismo medio afirma que anteriormente había sido expulsada de varios casinos de Las Vegas por ocupar una técnica similar para ganar.

En Daily Mail omite una explicación del porqué el casino Crockgors ocupaba estas cartas con un diseño tan poco seguro, sobre todo en mesas de niveles tan altos.

Estos diseños de cartas son, históricamente, fáciles de marcar y son muy sensibles a todo tipo de impresiones, por lo mismo si el casino las uso cayó en un grave error de seguridad.

Ahora el tema está en manos de la justicia y se espera que en un par de meses el problema este resuelto. Me imagino que Ivey no debe estar muy preocupado por los 12 millones, sin embargo, su honra como jugador está en disputa y eso no tiene precio.

¿Qué opinas sobre este caso?