Tal vez la escena más repetida a lo largo de las películas es la que muestra a cierto jugador poniendo una gran «cara de poker» mientras su rival trata descifrar cuál es la mano que lleva.

Jennifer Tilly y su pareja Phil Laak.

Poder controlar las emociones en una mesa se ha convertido en el gran reto y el centro de estudio a nivel mental de los últimos años, mucho más si se habla de torneos en vivo. Es por ello que recientemente Jennifer Tilly reveló algunos de sus secretos para poder lograr una imagen que no dé la posibilidad de ningún tipo de lectura por parte de sus oponentes.

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Con más de 100 apariciones en la pantalla grande, esta actriz y jugadora de poker estadounidense también tiene más de un millón de dólares en ganancias según The Hendon Mob además de un brazalete WSOP que obtuvo en un evento exclusivo para mujeres en la edición de 2005. 

Recientemente ofreció una entrevista en la que se le preguntó por su carrera tanto en el cine como con las cartas y al tratarse se un medio no especializado en la industria, una de las primeras pregunta estuvo relacionada con la famosa «cara de poker».

«La clave para una buena cara de poker es comportarse ‘como si’. Cuando estoy faroleando, finjo que tengo una mano de ases, y eso me hace sentir serena».

Los nervios de quedar eliminado si el bluff no sale de la forma prevista es una de los mayores miedos de un jugador, es por ello que Tilly sabe que desarrollar esta habilidad no es algo que todo el mundo puede hacer e incluso confiesa que le ha servido fuera de las competencias.

«Esta ha sido una habilidad psíquica que me ayuda en el poker además de ser ventajoso cuando necesito que mi novio traiga algo a casa y no contesta su teléfono, esa es la cara que pongo cuando regresa».

Cuando habla de su pareja se refiera a Phil Laak , quien es un jugador profesional con el que mantiene una relación desde comienzos del 2000.

«He tenido un juego de poker en casa con Laak durante 20 años. Compramos US$20 y jugamos por cinco centavos y veinticinco centavos. ¡Más divertido que perder dinero como degenerados!», concluyó a US Weekly.