¿Cómo hizo para transformar 380 pesos a 58 millones en el casino?
Una jugadora argentina recibió el toque de la diosa fortuna con unos billetes que no alcanzan para nada, pero se ganó todo.
¿Quién no postergó planes cuando en su mesa se sienta una ballena regalando dinero por doquier? «Mi amor, me atrasé en la oficina» o «tengo algo que hacer, no voy a poder asistir a la reunión» deben ser las frases más dichas y escuchadas cuando esto sucede.
Pero si el casino en el que estás jugando comienza a prenderse fuego, lo primero que vas a hacer es huir… ¿no? Quizás sí, quizás Korn…
Después de esto, ya en horas de la mañana, Andrés hizo lo que toda persona normal haría: irse directo a casa.
–¡Le recuerdo que está bajo juramento!
–Eh, bueno. Quizás fue a buscar una partida y al no encontrar nada potable hizo lo que cualquier buen hijo de vecino: se fue a jugar online.