Este año una de las manos más increíbles del poker cumplirá 13 años y no es una de esas jugadas extraordinarias ni un cooler con pocas probabilidades, por el contrario, es un error muy común y que a todos les podría pasar, incluso al mismísimo Phil Ivey .

En este torneo Joe Cada se convirtió en campeón.

La historia se remonta al multitudinario Main Event de la WSOP 2009 en donde la leyenda viva foldeó la mano ganadora ante la incredulidad de los comentaristas que estaban siendo testigos.

Era el Día 8, con 26 jugadores aún en competencia, entre ellos Ivey, considerado el jugador más fuerte del mundo en ese momento, y por muchos aún hoy.

En el nivel de ciegas 60K/120K, Ivey abrió desde UTG a 320K con 8 8. Todos foldearon menos Jordan Smith , quien en la BB decidió subió a 1M con A 9 y tras pensar un momento, Phil dio el call.

Flop: 5 Q 10

Ambos pasaron para ver el turn Q y el river A. En este punto, Ivey le preguntó al oponente qué tenía, a lo que Smith respondió «Ace» y mostró las cartas. ¡Phil tiene la mano ganadora, pero increíblemente hace una mueca de decepción y tira sus cartas con enojo!

VIDEO | El error de Phil Ivey

¿Qué pasó? Ivey responde…

Varios años después, en una MasterClass impartida por Ivey, y tras el revuelo mediático que había causado en su tiempo, se le preguntó qué había pasado en esta mano y respondió.

«Fue un error no haber apostado el turn. Y cuando cometes un error como ese en esa etapa de un torneo, automáticamente te irritas. Y una vez que salió el as, me di cuenta de que perdí. No revisé dos veces mis cartas por eso, porque estaba frustrado por no haber apostado en el turn. Una vez que salió el as, supe que perdí la mano en mi mente. Y no miré mis cartas. Este es un error que la gente comete todo el tiempo… Y lo he hecho varias veces, solo que esa fue la primera vez que se vio en TV», esclareció Ivey.

Con esa explicación pueden darse cuenta de lo democrático y estresante que pueden llegar a ser los torneos de poker. Estos encuentros someten a los jugadores a una acumulación de estrés continuo. Así que si ustedes se sentían apenados por un error en la mesa de este tipo, tengan por consuelo que hasta las leyendas les pasa.

Finalmente, en ese torneo Ivey quedó el séptimo lugar con un premio de US$1.4 millones, mientras que Joe Cada fue el campeón mundial, ganador del brazalete y de US$8.5M.