Cuando hace unos meses abrió su cuenta en Brasil Poker Live, integrante de la red Aconcagua Poker, seguramente era imposible para él imaginarse que sus dos mayores éxitos llegarían en días consecutivos. Pero así fue para Gustavo Louro , quien el martes se convirtió en uno de los 10 afortunados en hacerse con un paquete completo para jugar el WSOP Main Event 2017 y el miércoles alcanzó el podio en el High Roller del Diciembre Millonario que le dejó otros AR$219.560 en su cuenta.

Gustavorl, en el Road to Vegas

«Es un sueño que estaba bien lejos de concretar y una oportunidad única para mí», asegura este joven de 23 años que hasta hace poco trabajaba en un call center y, al quedar desempleado, decidió aumentar su volumen de juego online de manera exitosa. «Estoy jugando solamente en vivo y en BPL, ya que como soy estudiante y vivo en una ciudad lejos de mi familia, es muy importante el contacto directo con mi representante que me soluciona fácilmente algunas cosas como la carga y descarga de fichas, además de ayudarme con el soporte del sitio y la cuenta», dice Gustavo.

Gustavorl, tal es su nick en la sala, es oriundo de Londrina, Estado de Paraná, y le sacó enorme rédito a su actividad en Aconcagua Poker ya que clasificó tanto al Diciembre Millonario como a su High Roller a través de los distintos satélites diarios. De esta manera también obtuvo su lugar en los Magic Freeroll que se realizarán el 25 de diciembre y que, combinados, reparten AR$1.500.000.

Y qué decir de su proeza en el Road To Vegas Apertura 2017, a donde se clasificó primero tas alcanzar mesas finales en el KnockOut de los jueves y gracias a otro ticket que obtuvo en un DeepStack FO de los viernes. «La estructura del freeroll ayudó mucho e hizo que el juego sea muy técnico hasta el final», aseguró Louro, quien ahora se cuestiona que deberá controlar toda la ansiedad que esto le genera. «Ahora tengo que buscar conocimiento para intentar mantener estas conquistas«, concluyó Gustavo.

Sin dudarlo, reconoce a quién tiene que dedicarle estos éxitos rápidamente: «A mi novia, que me aguanta tanto tiempo de espera cuando intenta comunicarse conmigo y demoro en responderle por estar demasiado concentrado. Y también a mi familia, que aunque están lejos entienden un poco de este juego y me apoyan en esta etapa de mi vida».