Culmina el año y el gremio de los casinos en México hizo un balance de lo que han sido estos últimos 12 meses en los que la industria ha venido creciendo a pesar de tener la marea en contra.

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El 2023 se caracterizó por ser un año el que el sector de juego del país estuvo constantemente amenazado por el gobierno central, que tuvo una postura firme de no permitir nuevas aperturas de establecimientos al mismo tiempo que modificó el reglamento de ley para brindar un marco regulatorio complicado. Aún así, los números que se lograron fueron alentadores.

Los casinos en México están en constante movimiento.

Miguel Ángel Ochoa , presidente de la Asociación de Permisionarios, Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juegos de Apuestas en México (AIEJA), ofreció recientemente una entrevista en la que destacó que entre los puntos positivos se encuentra que de los 380 casinos que había en operación en marzo del 2020, están cerrando el año con 429, lo que muestra una tendencia sostenida de crecimiento.

«Estimamos que los casinos instalados en los 29 estados de la República reciben cerca de siete millones de visitas al año. Además, nuestro sector genera alrededor de 200.000 empleos, entre directos e indirectos, sumando las verticales online y todos los servicios de atención y proveeduría que trabaja para la industria».

En cuanto a la polémica que se desatado con la modificación en el reglamento que prohíbe la apertura de nuevas salas y limita el uso la máquinas tragamonedas en todo el país, Ochoa mira el lado positivo.

«Sin querer minimizar los alcances negativos, creo que nos ofrece la oportunidad de unir fuerzas con el gobierno mexicano, con el Poder legislativo y con la industria en su conjunto para plantear una nueva iniciativa de ley que venga a suplantar la que actualmente rige al sector, que es muy antigua», destacó en la entrevista a Yogonet.

Ahora, 2024 planteará nuevos retos y desde AIEJA están listos para enfrentarlos de la mejor manera para hacer que tanto el sector en general como la experiencia del usuario final sea un aspecto de referencia en toda América Latina. Al ser un año electoral en el que el presidente terminará su mandando en septiembre, habrá que ver cuál es el línea a seguir de la nueva administración.