POKER ENV TV
Miren Tiempo de Poker con Tomatee Benítez
Salió una nueva edición del programa que va se está transformando en cita obligada para los amantes de este deporte mental, esta vez con una entrevista al crack uruguayo.
Aquellos que tienen memoria recordarán cuando Leo Fernández gastó alrededor de 20 balas en un torneo del viejo Conrad (hoy Enjoy) de Punta del Este . El argentino explicaba que lo había hecho porque la organización haber añadido plata extra al pozo y, por eso, valía la pena invertir para ir en búsqueda de ese «dinero muerto». Ahora en la World Series of Poker sucedió algo, digamos, parecido, aunque seguramente debe ser récord. El protagonista es Scott Seiver .
El ganador de cuatro brazaletes –el último de ellos hace dos viernes nomás– sorprendió al comprar 43 entradas en el Evento #24 de la WSOP, $1.000 FLIP & GO No-Limit Hold’em, con lo cual totañlizó un gasto de 43.000 dólares. El resultado fue una pérdida total, ya que el estadounidense no logró superar la primera etapa y quedó fuera del dinero.
El reconocido Pro ingresó al evento híbrido, el cual comienza a jugarse estilo Flip, o sea con all ins compulsivos -una especie de moneda al aire- y luego sí los clasificados juegan al tradicional Hold’em. El torneo comienza cuando a cada jugador se le reparten tres cartas en la primera mano y se le obliga automáticamente a ir all in. En ese momento, tienen que descartar una carta de esas tres. Luego, todos en la mesa dan la vuelta sus dos naipes restantes y el crupier revela el board.
El jugador con la mejor mano gana la mesa y automáticamente entra en el dinero y se clasifica a la fase convencional. El resto pierde y puede volver a entrar si así lo desea, poniendo nuevos 1.000 dólares de inscripción. Después de que concluye la ronda Flip & Go, los jugadores que quedaron en pie van por el brazalete y ya saben que, al menos, algo de dinero cobrarán. El campeón se conocerá este lunes. Y no es Seiver, precisamente…
Como se apreciará en las siguientes imágenes, al menos quien ingresará al Salón de la Fama se divirtió a lo grande. Cabe destacar que esos 43.000 dólares no lo harán irse a la bancarrota: sus ganancias solo en vivo se cuentan en 25 millones de dólares. De vez en cuando se puede dar un capricho, aunque éste sea insólito.