Llega un punto dentro del desarrollo de cualquier jugador que se tome en serio el poker, en el cual se plantea qué modalidad es la que va a practicar mayoritariamente. Es cierto que no es incompatible jugar dos o más disciplinas dentro del juego, pero siempre se prestará más atención a una de ellas, ya sea porque es la que más nos motiva, la que mejores resultados nos aporta, o en la que creemos que vamos a generar mayor EV.
A continuación vamos a ir comentando las particularidades de centrarse en cada una de las modalidades, teniendo en cuenta que el juego en vivo y el online tienen características diferentes, por lo que separamos las modalidades que se puedan jugar tanto de forma virtual como presencial.
Jugar online es bastante cómodo, pero no es lo mismo a estar en vivo. ¿Y si los mezclamos?
Quizás la modalidad más practicada por el público, donde todos los días se congregan miles y miles de jugadores peleando por la victoria. Sin duda es la disciplina en la que se viven las mayores satisfacciones y también las mayores penas. Esto es algo a tener en cuenta si queremos jugar torneos online regularmente. La varianza de estos es muy grande, y se hace mayor cuanto mayor es el field.
El hecho de que se pueda conseguir un premio de miles de dólares con una inversión de unos US$10-20 implica que cientos o miles de personas deben quedarse sin premios, y no hace falta ser estadístico para saber que lo más probable en un torneo es que te eliminen antes de llegar a premios. Pero no todo es malo, el field en los torneos suele ser blando, más blando cuanto más económico es el buyin. Es por ello que las veces que un jugador con experiencia llega a las fases finales de un torneo, tiene mucha ventaja sobre sus rivales más novatos, esa experiencia se suele traducir en mucho dinero de EV, ya que los saltos de premios en las fases finales son grandes, y ahí es donde los mejores jugadores deben marcar las diferencias.
Otra ventaja que nos da jugar torneos online es el volumen que se puede hacer, un jugador que trabaje duro puede jugar en un año miles de torneos, eso significa que reducirá la varianza, es decir, a priori sus resultados reales se acercarán a los teóricos mucho más que los de un jugador que tenga una muestra mucho más pequeña.
Para muchos la modalidad más dura de todas, y por mi experiencia puedo decir que estoy de acuerdo. Algunos de los mejores jugadores del planeta han pasado muchas horas delante de la pantalla jugando cash online. También es una modalidad muy sacrificada, en lo referente a las horas de estudio necesarias para ser competente.
Si bien las otras modalidades requieren también de estudio, la preparación de muchos jugadores de esta disciplina suele ser más alta que la del resto. Algo que para mí es positivo del cash online es que se trata de una modalidad cuya progresión se puede hacer de forma paulatina. Es posible empezar a jugar en mesas de centavos y en unos años acabar jugando por botes de miles de dólares, pasando por los stakes intermedios como si de un videojuego se tratase.
Creo que el camino que se sigue para llegar hasta arriba es el adecuado, porque el jugador requiere mucho tiempo y experiencia para llegar a lo más alto, y en la mayoría de los casos se llega suficientemente preparado por todo el bagaje acumulado en los niveles inferiores.
Esta modalidad ha sufrido cambios importantes en los últimos tiempos. La llegada de los spin & go ha desplazado a un segundo plano al formato más tradicional. Muchos regulares de sits y de otras modalidades han acabado seducidos por el nuevo formato.
Para los jugadores recreacionales ofrece sensaciones fuertes en poco tiempo, ya que en unos minutos tienes la posibilidad de ganar grandes premios, y los jugadores regulares se ven atraídos por la gran cantidad de recreacionales que practican esta modalidad. La varianza de los spins es bastante elevada, el hecho de que unos torneos valgan más de 1000 veces más que otros hace que nuestros resultados en una muestra no necesariamente pequeña dependan en gran medida de lo bien que nos vaya en los multiplicadores más elevados.
Los jugadores más experimentados han creado herramientas en las que miden el EV generado por nuestro juego, algo que puede dar cierta tranquilidad si nuestro juego es ganador a pesar de que los resultados no acompañen.
Sin duda la modalidad más popular. Muchos de nosotros hemos tenido el primer contacto con el mundo del poker a través de algún vídeo o programa en el que retransmitían un torneo en vivo. Para muchos jugadores el llegar a ganar un gran torneo en vivo les ha dado la posibilidad de catapultarse a la fama, y conseguir grandes beneficios en forma de patrocinios. Pero en esos programas sólo se ve la cara amable de los torneos en vivo.
Como en cualquier torneo, la mayoría de los jugadores no salen satisfechos por el resultado. Ni que decir tiene que los torneos en vivo tienen mucha varianza, y en este caso sí que es muy complicado minorar su efecto con volumen, ya que por mucha oferta existente es complicado llegar a jugar la décima parte (siendo generoso) de lo que podríamos hacer online.
Decir que el field de torneos en vivo suele ser bastante blando, incluso en torneos de buy-in elevado podemos ver jugadores poco experimentados, que a la hora de jugarnos el dinero cometerán muchos errores. Los buy-in y gastos asociados a los torneos en vivo hacen que sea una modalidad que no se adapta a todo tipo de bolsillos. Así que mi recomendación es que si queremos dedicarnos a viajar jugando torneos en vivo tengamos un buen colchón de bank que nos permita afrontarlos con tranquilidad.
El cash en vivo es un vaivén de emociones.
La última de las modalidades de la que vamos a hablar es el cash live. Multitud de jugadores profesionales son habituales de estas partidas presenciales, en las que suele haber mucho jugador sin experiencia.
Decir que es una disciplina que puede dar buenos réditos a largo plazo, ya que los winrates en este tipo de partidas en las que los stacks son muy profundos pueden ser muy altos. También es una modalidad sacrificada, ya que requiere de muchas horas de trabajo y sesiones maratónicas sentado en la silla.
Al igual que en los torneos en vivo, es complicado comenzar en esta modalidad con un bank modesto, ya que las partidas más bajas suelen requerir de un bank de miles de dólares al menos. El hecho de jugar menos manos por hora (en vivo se pueden jugar unas 15 mientras que online se puede llegar a las 1.000) hace que adquirir experiencia sea una tarea más lenta, aparte de que los downs pueden alargarse bastante en el tiempo.
Por: Jorge Coello 
para la escuela de poker Drawing Dead.
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