Supongamos que eres un jugador regular y constante. Digamos que todos los días tu objetivo es jugar 1200 manos de cash games , o 40 sit & go’s , y que eres capaz de hacerlo sin estar condicionado por el resultado de la sesión que estás jugando: un equilibrio ideal en muchos aspectos, pero difícil mantener.
Mantener un equilibro te permitirá crecer como jugador de poker.
¿Quién, de hecho, nunca ha estado en una sesión particularmente ganadora y, por lo tanto, ha decidido estar satisfecho para no arriesgarse a perder lo ganado? ¿O quién nunca se ha encontrado jugando más de lo esperado, tratando de salvar una sesión?
En el primer caso, incluso si te das cuenta de que si continúas jugando probablemente seguirás ganando, el miedo a arruinar lo que se ha hecho hasta ahora es mucho mayor que el deseo de optimizar tus ganancias . En el segundo, sin embargo, el deseo de cerrar tu sesión es menor y te empuja a jugar bajo el efecto del tilt que probablemente no te permitirá hacerlo de la mejor forma.
Aunque no es simple, un jugador real intenta ver el poker como una sesión única e interminable y, por lo tanto, reacciona de manera opuesta a los escenarios descritos anteriormente.
En el caso de una sesión negativa, si sientes que estas haciéndolo mal, puedes decidir terminarla prematuramente, simplemente encogiéndote de hombros ante un mal día. Por el contrario, cuando te encuentras en una situación favorable, en la que las cartas giran de la manera correcta, te podrás sentir on fire, pero el miedo a perderlo todo te podría limitar.
Ser capaz de lograr un equilibrio similar en tu forma de vivir el poker, una vez que decides ser un grinder, es tan agotador como fundamental. Algunos pueden ser ayudados en esto por su naturaleza, su carácter, mientras que otros tendrán que trabajar en ello, pero lo que realmente marca la diferencia es probablemente la experiencia.
De hecho, quienes juegan constantemente viven sus sesiones particulares con creciente desapego, porque la experiencia los ha hecho cada vez más indiferentes a las fluctuaciones a corto plazo: el jugador real solo se preocupa por el largo plazo , lo que realmente importa.
Es más fácil decirlo que hacerlo, por supuesto, pero la búsqueda de un equilibrio cada vez más perfecto en la forma de experimentar el poker es uno de los innumerables e inevitables pasos a seguir para querer convertirse en jugadores significativamente mejores.
Fuente original: assopoker.com