Por José el Profe Litvak

Aceptar una apuesta en el river se impone cuando le tenemos confianza a nuestro juego, pero no la seguridad de ganar (en ese caso, raisearíamos), y, además, el pozo lo amerita: “jamás sólo porque el pozo lo amerita”.

Todo lo dicho y aconsejado será ejecutado de manera diferente según la posición. La mayor o menor información, en esta costosa etapa, es decisiva. Ahora, no para “limpiar” ni para “echar” sino para ganar más o para perder menos. Todo es importante, y la posición tanto o más.

Es difícil hacer recomendaciones genéricas, quizás el análisis de un ejemplo nos ayude a imaginar situaciones y, en su caso, a determinar los mejores cursos de acción.

En nuestra mano, tenemos K J y, hasta el turn, las cartas comunitarias son Q 7 2 10. Utilizamos un ejemplo que ofrece varios matices.

Supongamos que el river muestra un 4 ¿Cómo actuamos? Esta carta es neutra. No puede tener incidencia alguna que modifique la situación existente en el turn. Habrá que evaluar el perfil del o de los rivales. Nosotros hemos apostado en el turn sobre el 10 y haber recibido un segundo call desaconseja continuar con un bluff para llevarnos el pozo. No tenemos juego, solo dos proyectos no concretados (de color y de escalera) y, si el o los otros llegaron hasta esta instancia, por algo será.

Dependerá de la cantidad de oponentes y de los restantes condicionamientos, pero lo más recomendable parecería hacer un check y ver cómo actúa el resto. Si apuestan medianamente o fuerte y/o si alguien paga, habrá que resignar el pozo. Sólo una gran lectura, un coraje extremo o la sinrazón podrían impulsarnos a disparar un tercer barrel (empuje) que únicamente los grandes jugadores pueden hacer con “aire” ante dos calls seguidos.

Y si la quinta calle fuera el A. Esta espectacular carta nos da las nuts, por lo que habrá que sacarle el mayor rédito posible. Sin duda, corresponde una apuesta de valor de un tamaño adecuado para lograrlo sin que se nos escapen.

Y si fuera K aconsejaríamos prudencia. Tenemos el par mayor, pero hay posibles juegos superiores (escalera, set, pares dobles o A K, etc). Tratar de sacarle valor podría jugarnos en contra. Por ejemplo, no podríamos pagar una subida, aunque sea engañosa. Se impone checkear y analizar su acción o una apuesta de bloqueo medida.

Finalmente, si fuera 7 esta carta consolida un hermoso color al Rey, pero podríamos perder frente a un full, .frente a un poker, o a un color al As. Salvo que ambos estuviéramos muy profundos en fichas (gran stack), deberíamos apostar y sacar el máximo valor posible. Y si hay un raise, probablemente, habrá que soportarlo. Ganaremos más veces de las que perderemos

Como se ve, las situaciones son diferentes según la textura final del board, y las estrategias y cuidados también. Buena lectura, posición y acciones correctas determinarán los resultados.

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