¿Alguna vez te preguntaste cuánto valdría tu dinero en 10 años? En el mundo de las finanzas hay una regla inquebrantable: el dinero que no se pone a trabajar, pierde valor con el tiempo. La inflación, la depreciación y las oportunidades perdidas hacen que ahorrar no sea suficiente. Para quienes aspiran a construir riqueza y asegurar un futuro financiero, Codigo+ te dice la verdad: la inversión no es una opción, sino una necesidad.

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Invertir no se trata solo de cuánto dinero se tiene para ese objetivo, sino de cuánto tiempo se está dispuesto a esperar para verlo crecer. Aquí es donde entra en juego el poder del interés compuesto, una de las fuerzas más poderosas en el mundo financiero. Básicamente, esta herramienta permite que las ganancias derivadas de una inversión generen mayores rendimientos con el tiempo. Esto se conoce como efecto bola de nieve, ya que multiplica el capital sin demasiado esfuerzo.

El costo de no invertir

Muchos ahorristas piensan que mantener su dinero en una cuenta bancaria es la estrategia más segura. Sin embargo, la realidad es que los rendimientos de los productos tradicionales de ahorro rara vez superan la inflación, lo que significa que, en términos reales, el dinero pierde poder adquisitivo año tras año. En contraste, los mercados financieros ofrecen oportunidades de crecimiento a tasas mucho más altas.

Inclusive, en momentos turbulentos como el actual en el que los principales índices de Wall Street operan en rojo, el mercado siempre ofrece una ventana de oportunidad. Así, quienes postergan su decisión de invertir se enfrentan a una dura realidad: el tiempo perdido nunca se recupera.

¿Por qué invertir? Las razones son claras

Los motivos para invertir son numerosos, pero algunos de los más relevantes incluyen:

Hacer crecer el dinero

• Los mercados financieros ofrecen opciones que, a lo largo del tiempo, generan rendimientos superiores a los instrumentos tradicionales de ahorro.

Planificar la jubilación

• La inversión permite construir un patrimonio que garantizará estabilidad y tranquilidad en la vejez.

Superar la inflación

• Para que el dinero conserve su valor real, debe generar un rendimiento que al menos iguale o supere el índice inflacionario.

Alcanzar metas financieras

• Desde comprar una casa hasta financiar la educación de los hijos, invertir ayuda a materializar grandes objetivos económicos.

Aprovechar ventajas fiscales

• Ciertos vehículos de inversión, como los planes de jubilación, permiten diferir impuestos y optimizar el crecimiento del capital.

El momento de empezar a invertir es ahora

No es necesario ser un experto para dar los primeros pasos en el mundo de la inversión. Existen múltiples opciones, desde acciones y bonos hasta fondos indexados y bienes raíces, que permiten adaptar la estrategia a distintos niveles de riesgo y objetivos financieros.

De hecho, hoy el mercado ofrece un sinfín de plataformas que permiten dar el primer paso en el mundo de las finanzas. Un ejemplo de ello es Buenbit, la app que te regala tu primera inversión y que permite invertir directamente en la bolsa de Estados Unidos.

Este broker te abre una cuenta comitente en una sociedad de bolsa estadounidense, sin costo alguno, para que inviertas en el New York Stock Exchange (NYSE) desde 1 dólar. El plus es que el dinero invertido está asegurado por 500 mil dólares.

La clave está en empezar a invertir cuanto antes. Quienes comienzan temprano, incluso con pequeñas sumas, tienen una ventaja incomparable gracias al tiempo a su favor. Y para aquellos que creen que ya es tarde, la verdad es que nunca lo es: cada día sin inversión es una oportunidad perdida.

El dinero, bien gestionado, es una herramienta poderosa. Pero su verdadero potencial solo se desbloquea cuando se le da la oportunidad de crecer. La pregunta no es si debes invertir, sino cuánto tiempo más vas a esperar para empezar.