Japón aprobó el viernes un plan para construir el primer casino del país en la ciudad occidental de Osaka, allanando el camino para la apertura de un complejo de 1,08 billones de yenes (8.100 millones de dólares) en 2029, con el objetivo de atraer el gasto turístico nacional e internacional.

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El gigantesco complejo turístico ubicado en Yumeshima (la maqueta es la foto principal de esta nota), una isla recuperada en la bahía de Osaka que albergará la Exposición Universal en 2025, también incluirá hoteles, un centro de conferencias, un centro comercial, un museo y una terminal de ferry, mientras que los grandes apostadores tendrán acceso a un adyacente plataforma de helicóptero.

Anteriormente, los casinos eran ilegales en Japón junto con otros juegos de azar privados, pero una ley de resort integrado de 2018 proporcionó una excepción a los juegos de casino como el poker o el baccarat en establecimientos aprobados oficialmente como parte de un esfuerzo por atraer turistas.

Una vista del centro de Osaka, la tercera ciudad más grande de Japón.

Japón es visto como un mercado preciado para los operadores de casinos debido a su población acomodada de 126 millones de personas y su proximidad a los jugadores adinerados de Asia, aunque las encuestas de opinión han mostrado que mucha gente está preocupada por la adicción y el crimen.

La estadounidense MGM Resorts International y el socio local Orix Corp encabezaron el proyecto Osaka IR, y cada uno posee una participación del 40% en la compañía creada para administrar el complejo. Otras 20 empresas poseen el 20% restante, según un documento del gobierno local , que decía que MUFG Bank y Sumitomo Mitsui Banking Corp proporcionarían 550.000 millones de yenes (unos 4.100 millones de dólares) de financiación de proyectos para el complejo.

El primer ministro Fumio Kishida dijo que el proyecto contribuiría al crecimiento económico del área de Kansai alrededor de Osaka y el gran Japón después de la Exposición Universal 2025, ya que el país apunta a un repunte del gasto turístico luego de la pandemia.

El complejo tiene como objetivo percibir 520.000 millones de yenes de ingresos anuales (unos US$4.000M) , principalmente del negocio del juego, y pronostica que atraerá a 6 millones de turistas internacionales y 14 millones de visitantes nacionales.

Japón da el sí

La decisión del gobierno nacional se produjo después de que el Partido de la Innovación de Japón, a favor de los casinos, retuviera los cargos de gobernador de la prefectura y alcalde de la ciudad en Osaka hace seis días. Una encuesta realizada por el periódico Mainichi a los residentes de Osaka este mes encontró que el 45% de los encuestados estaba a favor del casino, el 38% en contra y el 17% indeciso, aunque era más probable que las mujeres y los ancianos se opusieran.

Los planes de casino de Japón se vieron obstaculizados en el pasado por la pandemia de coronavirus y un escándalo de soborno que condujo al arresto de un legislador de alto perfil. Los principales operadores de casinos Las Vegas Sands Corp, Caesars Entertainment Corp y Wynn Resorts Ltd se retiraron de los proyectos planificados.