Los fanáticos más acérrimos del poker seguramente recordarán el famoso segmento de ESPN en el que Doyle Brunson hablaba sobre su amuleto de la suerte, un encendedor Zippo con el logo de los Cazafantasmas y cariñosamente conocido como «Casper».

• VER TAMBIÉN
  Doyle Brunson eterno: se cumple un año de su partida
  

Brunson habló extensamente sobre él en su autobiografía y cómo Casper se convirtió en un amuleto tan poderoso que otros jugadores le pagaban para alquilarlo por una hora. La tarifa variaba según el juego y los jugadores, pero según su estimación, Brunson afirmó que Casper le había generado más de US$25.000 solo en tarifas de alquiler.

Este amuleto fue tan afortunado que el infame Howard Lederer intentó comprarlo. «Tuve tanta suerte cada vez que usaba mi protector Casper que mi amigo de juego Howard Lederer me ofreció US$3,500 para dejárselo en herencia en mi testamento», escribió Brunson. «No estaba seguro de que fuera en serio hasta que puso el dinero. Así que le legué Casper. Casper ya estaba ganando fama porque grinders se habían enterado de nuestro acuerdo. ESPN incluso se hizo eco de la historia».

La biografía «The Godfather of Poker» está disponible para su compra.

Brunson luego compartió que su hija, Pam Brunson, usó a Casper en el Main Event de la WSOP de 2006 y superó tanto a su padre como a su hermano, Todd Brunson. En 2007, lo usó nuevamente y terminó en el puesto 364 de 6,358 jugadores ganando un premio de US$35,000, superando a sus familiares por segundo año consecutivo.

Casper siguió demostrando ser un amuleto de la suerte para Pam, e incluso suplicó en televisión que Lederer devolviera los derechos.

«Howard, por favor, deja que mi papá tenga de vuelta a Casper. Sé que se lo vendió, pero significa mucho para mí, y debe quedarse en la familia».

Lederer vendió a Casper de vuelta a Brunson, aunque por US$7,500, más del doble de lo que pagó por él. Entonces, ¿dónde está Casper ahora? A través una entrevista a un medio estadounidense supimos que Pam Brunson confirmó que ella lo tiene y «está guardado en algún lugar».

Quién sabe, tal vez algún día Casper ayude a Pam a capturar su propio brazalete.

«Y si eso sucede», escribió Brunson sobre la posibilidad, «seguramente inducirán a Casper el Fantasma Amistoso al Salón de la Fama del Poker».