Ya es viernes y como se ha vuelto la tónica durante las últimas semanas hoy nos toca contarles alguna que otra noticia rara, freak o como quieras catalogarla. Nuestro protagonista en este día es un oficinista japonés al cual pillaron jugando poker en sus horarios de trabajo y fue duramente multado. ¿Ustedes no hacen eso, cierto?

La historia nos sitúa en la ciudad de Sennan, Japón, en donde una persona, del cual desconocemos su nombre, sufrió un bad beat no en el poker, sino por parte de un compañero de oficina que lo delató por estar jugando con el computador del trabajo.

El “buen” amigo nunca pensó que su acción le costaría a su compañero de labores una multa de $7.600 y una reducción del 10% de su sueldo.

Es sabido que la disciplina japonesa es bastante estricta y tras la acusación la empresa le abrió un juicio en donde las investigaciones arrojaron que el aficionado al poker había pasado más de 281 horas a lo largo del año jugando en el computador de la oficina.

A partir de estas pruebas se conformó que nuestro amigo japonés tuviese que pagar una multa de acuerdo al tiempo jugado divido por su sueldo lo que arrojó un pago de $7.600.

El estricto rigor de las empresas japoneses prohíbe todo tipo de juegos o páginas que distraigan a sus trabajadores. Ahora nuestro rounder nipón tendrá que conformarse con jugar en su casa a ver si puede recuperarse de este bad beat.