Ni los mejores jugadores del mundo son capaces de evadir coolers. Por más bien que jueguen, no hay forma de que una corazonada al estilo Phil Hellmuth los haga foldear una mano cuando la matemática indica lo contrario. Por eso, cuando Jonas OTB_Redbaron Mols se encontró con K K jugando heads-up contra Timofey Trueteller Kuztnesov en PokerStars, sabía que iba a ir a fondo.

Después de una seguidilla de raises y re-raises consiguió lo que buscaba, poner sus casi 80 mil dólares al centro. Unas 200 big blinds, teniendo en cuenta que jugaban US$200/US$400. Con lo que no contaba es que el ruso iba a despertar con la única mano que domina a los reyes…

Buen momento para empezar a rezarle a Ala, Buda, Ra, Zeus y cualquier otro Dios que recuerde. En especial, de ser posible, a los dioses del poker. Esos que desde allá arriba – o quizás abajo – se encargan de hacer maldades como esta:

Dos veces la runnearon, dos veces apareció un rey al flop para darle set a OTB_Redbaron, quien se llevó la mano pero igualmente no pudo evitar perder dinero en la sesión.

Así que la próxima vez que estés del lado desfavorable de la moneda, recuerda que a todos les sucede. Incluso a los mejores del mundo.

Fuente y foto: HighStakesDB