Bluff: el arte esencial del poker explicado por Dan Cates
El profesional desglosa el arte del engaño en las mesas, defendiendo el juego como un deporte mental y ofreciendo claves para mejorar a los principiantes.
Farid Jattin , uno de los referentes del poker colombiano con más reconocimiento internacional, ocupó el sexto lugar del World Poker Tour (WPT) Borgata, que llegaba a su definición este viernes en New Jersey . Farid había entrado a la mesa final como líder del chipcount, con un sólido stack de 15.735.000 puntos, prácticamente triplicando a su inmediato seguidor, el local Zach Gruneberg , quien contabilizaba 5.390.000 unidades en su poder.
Como si se tratara de una maldición, Farid vio esfumarse de sus manos ese promisorio recaudo en menos de 2 horas. Primero un par de ochos que lució sólido en un flop 2 – 2 – 3, quedó a merced de una escalera que se completó con un 6 en el turn y el 4 – 5 que enseñó Taha Maruf en el showdown. Luego, en una mano en la que recibió con AK, para buscar la probabilidad de eliminar a Simon Lam y Jesse Sylvia la varianza no le dio ayuda frente al par de veleros del último.
Su stack ya iba por la mitad de la cuenta del inicio del día y pronto se vio desplazado del liderato. Entonces, muy a su estilo, Farid intentó un movimiento que se antojó más osado de la cuenta. Terminó jugado en un 5-bet all in con 5-4 off. La fortuna le dejaba aún un 35% de probabilidades contra el AK de Sylvia. El flop complicó mucho más las cosas para el barranquillero al mostrar A – 3 – T que prácticamente redujo las opciones de Jattin al 2 para la escalera. El milagro no ocurrió y quedaron menos de 2 millones en la cuenta para el barranquillero.
En su último spot, Farid no salió airoso ni conectando su set con par de ochos. El muñeco de nieve llegó en el turn, y antes ya había caído en el flop un fatídico As que puso demasiado adelante al par de cohetes de Zach Gruneberg. Fue como una ironía más de una tarde impredecible, en la que el jugador de béisbol en su época de estudiante, vio extinguirse de a poco la hoguera que con tanto vigor había dejado encendida en la velada previa.
Al final, Jattin se despidió con el honor de haber sido el único jugador no nacido en los Estados Unidos que llegó a la mesa final de este durísimo WPT Borgata. Un premio de 167.942 dólares será apenas un consuelo para Farid, que debió visualizarse bastante llegando a los 821 mil verdes que, en compañía del trofeo, serán el botín para el campeón. El grinder también dejó pendiente la tarea de establecer una nueva marca en cobros en vivo, logro que habría conseguido en caso de llegar al menos a la cuarta ubicación en el certamen.
Luego de la salida del caribeño, el siguiente en caer fue Chris Limo . En cuarto lugar terminó Simon Lam y Taha Maruf se despidió en el 3-handed. A cada uno de ellos les correspondieron premios por 207.569, 250.970 y 300.031 dólares, respectivamente. De esta manera, Zach Gruneberg y Jesse Sylvia quedaron listos para definir entre ellos el trofeo de campeón, con apenas una ciega de diferencia entre sus stacks al iniciarse el heads up.