¿Sabías que…? Hay una mano de poker que se las ha arreglado para pasar a la historia y no precisamente con la mejor fama. Bautizada como «La mano del hombre muerto», puede ser rastreada hasta finales del siglo XIX pero no fue hasta 1920 que se vinculó con quien parece ser el verdadero protagonista: Wild Bill Hickok, notable pistolero y leyenda del viejo oeste .

Según cuenta la leyenda, Hickok se encontraba en una partida de 5 Card Stud en el Nuttal & Mann’s Saloon en Dakota cuando un enemigo suyo, Jack McCall, le disparó por detrás causándole la muerte. Al momento del disparo Hickok disputaba una mano y sus cartas, de acuerdo con la historia, eran doble par de ases y ochos. En lo que no hay acuerdo es en la identidad de la quinta carta pues mientras algunos opinan que era la dama de corazones, otros dicen que McCall hizo el disparo cuando Hickok realizaba el draw (cambio de carta) por lo que nunca llegó a ver cuál era el último naipe de su mano.

Aún así, en varios lugares en los que se cuenta la historia o se escenifica lo ocurrido, los palos de las cartas cambian y la quinta carta también suele variar siendo la jota de diamantes y la dama de corazones los recursos más habituales.

Otras referencias a «La mano del hombre muerto» cambian por completo la jugada afirmando que consistía en un full house de jotas y dieces o dobles parejas de jotas y ochos. Sin embargo, la versión más aceptada en el mundo del juego es la que hemos contado.