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El mago no encontró la magia y perdió un pozo de US$323K
Antonio Esfandiari volvió a las mesas televisadas y a pesar de que sus poderes fallaron una vez, al final de la noche fue el máximo ganador.
Si alguna vez han sentido el impulso irrefrenable de jugar poker en todo momento, entonces podrían padecer de «Pokeritis». No te preocupes, esta «enfermedad» no es grave y, de hecho, tiene una cura documentada en lo que es la primera película de poker de la historia: A Cure for Pokeritis, un corto que fue estrenado en 1912.
Este film, digno de recordarse en nuestra nueva edición de Viernes Freak, es una comedia que aborda la “adicción” al poker de manera cómica y moralizante. En la trama, una esposa decide frenar el hábito de apuestas de su marido organizando una falsa redada policial en su juego semanal de poker, con la ayuda de su primo. El desenlace tiene una moraleja: el protagonista promete no volver a tocar una baraja de cartas nunca más. Sin embargo, queda la duda de si cumplirá su promesa.
En la era del cine mudo, estas películas solían estar acompañadas de música en vivo, lo que le añadía un toque especial a la experiencia. A Cure for Pokeritis ha sido comparada con sitcoms de las décadas de 1940 y 1990 por su humor sencillo y su visión de los roles de género. De hecho, esta cinta ha sido analizada por historiadores del cine como un reflejo de las percepciones sociales de la época sobre el poker como un vicio predominantemente masculino.
En 2011, la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos seleccionó esta película para su preservación en el National Film Registry, reconociéndola como cultural, histórica y estéticamente significativa. Si nunca la has visto, aquí te dejamos el enlace para que disfrutes de este clásico del cine mudo y del poker.